Cuando hablamos de la transformación empresarial, nos referimos al proceso de conversión de una entidad para que pueda ser lo suficientemente ágil y así responder a cualquier tipo de evento rápidamente, pues el tiempo es un factor que incide en la capitalización de ventajas competitivas o hasta en la supervivencia.
Bien decía Renato Leduc: “Sabia virtud de conocer el tiempo”.
Para aquellos que gusten del fútbol americano, estarán de acuerdo que el manejo del reloj y la administración de los tiempos fuera, son fundamentales para ganar un partido.
El timing
Así pues, vamos a comentar algunos aspectos en los que se destaca la importancia del “timing”.
El primero de ellos es el “time-to-market”, pues como decimos coloquialmente “el que pega primero pega dos veces” (no significa pegar como sea, contal de pegar primero, está implícito el pegar bien).
Gracias a la utilización de herramientas digitales, el proceso de desarrollo de productos se ha venido reduciendo dramáticamente y se ha convertido en un factor de diferenciación entre competidores, un ejemplo es el uso de las impresoras 3D para la fabricación de prototipos.
El segundo aspecto se refiere al manejo del “timing” para reaccionar a tiempo a variaciones en el consumo que implican la toma de decisiones sobre resurtidos, por ejemplo. El uso de herramientas digitales como el blockchain y big data, que son muy útiles.
Piso de producción
Pero de nada serviría contar con esta información, si no tenemos un modelo de manufactura flexible, que permita reaccionar en el piso de producción ante este tipo de eventos.
Pero sigamos hablando del tiempo y ahora mencionaremos el “timing” de reacción ante eventos que suceden súbitamente, como pudiera ser un ataque cibernético, un desastre natural o una pandemia.
Para ello, es importante que las empresas cuenten con planes de contingencia actualizados, auditados y que su personal se encuentre capacitado para su rápida y efectiva aplicación.
Una empresa ágil
Como podrán apreciar en estos ejemplos, para una empresa ágil necesita herramientas, personal capacitado y una sólida integración de procesos.
En otra ocasión platicaremos del “No Code”, herramienta que permite el desarrollo e integración de datos sin programación, lo que incide también en la reducción del “timing”.
“La mayor pérdida de tiempo es hacer algo que no necesitamos hacer”, Grerchen Rubin.
