El Aeropuerto Internacional de Laredo, Texas, avanzó 30 lugares en los últimos tres años en cuanto al manejo de transporte de carga en Estados Unidos, y actualmente está por encima de ciudades como Austin, El Paso, Lubbock, Harlingen y Brownsville, al registrar más de 808 millones de libras (366,502,336 kilos) en el 2022.
La terminal aérea se encuentra en su mejor momento operativo al ocupar el 40° lugar en Estados Unidos, y con ello ha marcado un nuevo récord desde el 2015, acercándose a los niveles de San Antonio, Texas. En contraste, en el 2020 se encontraba en el 70° sitio.
El movimiento de carga que este aeropuerto registró en el 2022 representa también un 28% de alza en comparación con lo que llegó en el 2021, y el panorama es que continúe con incrementos debido al fenómeno del nearshoring, al estar ubicado en una zona estratégica que tiene conexión directa a carreteras, puentes internacionales terrestres y ferroviarios con México, consolidando una de las redes logísticas más importantes para el comercio internacional.
Gilberto Sanchez, administrador del Aeropuerto Internacional de Laredo, Texas, en entrevista exclusiva para Mexico Industry, mencionó que actualmente existe suficiente infraestructura, capacidad y planeación para sostener el crecimiento, así como para mantenerse competitivos.
“Para nosotros ha sido muy positivo el análisis del movimiento de carga que ha tenido el aeropuerto en los últimos años. Ya sobrepasamos las cifras de Austin y por supuesto los de todo Rio Grande Valley; ocupamos el lugar 40 en Estados Unidos, estamos seguros de que seguiremos creciendo. Tenemos grandes ventajas competitivas como la ubicación, infraestructura, coordinación en materia aduanera y la especialidad en logística”.
Nearshoring
En víspera de atender la demanda para los siguientes años, el administrador destacó la inversión de 87 millones de dólares en mantenimiento de infraestructura, la atención a diversas regulaciones y la expansión de la aeropista.
Las industrias que utilizan el Aeropuerto Internacional de Laredo obtienen las facilidades del programa Foreign Trane Zone (FTZ), que brinda exenciones en el pago de impuestos durante los procesos de manufactura. “Las piezas se envían y pueden regresar cuantas veces sea necesario, el producto no paga impuestos hasta que esté terminado”, enfatizó Gilberto Sanchez.
La relocalización de las empresas, fenómeno conocido como nearshoring, es el principal aspecto que ha favorecido a tener más movimiento de carga en los últimos años y también el que contribuye a los panoramas positivos del futuro.
Laredo es una ciudad que comparte fronteras con dos estados mexicanos: Nuevo León y Tamaulipas, por ello, las oportunidades de movimiento internacional son mayores, recalcó el administrador, al reconocer que el crecimiento se acompaña de la atención a nuevos retos y áreas de oportunidad.
En este sentido, está la creación de nuevos almacenes, por lo que en los siguientes meses se espera aterrizar al menos dos contratos de empresas que desarrollen y administren bodegas, en las que diversos tipos de mercancía lleguen, se trasladen y sean resguardadas hasta cumplir sus tiempos de entrega.
“El sector logístico es un aspecto fuerte para este aeropuerto, tenemos rutas directas a carreteras internacionales que nos conectan a México y también a Canadá, por ejemplo, como la interestatal 35. Los proyectos de estas bodegas harán mucha diferencia y darán nuevas oportunidades”, señaló.
Además, el aeropuerto planea en este 2023 aterrizar nuevos destinos para pasajeros a las ciudades de Houston y Dallas, a través de aerolíneas con presencia global. En el 2022, alrededor de 111,000 personas volaron a destinos locales e internacionales desde Laredo.
El primero en Estados Unidos
Sanchez señaló que el Aeropuerto Internacional de Laredo, Texas, fue el primero en Estados Unidos en la planeación de una aduana de inspección conjunta, en el que oficiales del Customs and Border Protection (CBP) revisan y validan mercancías en coordinación con personal de la Agencia Nacional de Aduanas de México (ANAM).
En este sentido, la ruta de Laredo a Guadalajara, Jalisco, México, es crucial. “Esto es parte de la buena relación que hay entre México y Estados Unidos, estamos conscientes de que el tiempo es dinero y de que, al tener una aduana con revisión conjunta, las empresas ahorran en sus procesos; además, tienen la garantía de que su mercancía está segura, en Laredo fue donde todo comenzó”, concluyó el administrador.