Font size:
Imprimir
Richter de México nació en 1984 como una pequeña empresa familiar operada por cuatro miembros. En sus inicios, la incipiente compañía se dedicaba a la extrusión de mangueras, las cuales se utilizaban para la conducción eléctrica y de agua.
Sin embargo, la visión de su fundador, Sabino Rodríguez y su hijo, Víctor Hugo Rodríguez López, actual director general de Richter de México, los llevó a convertirse en una empresa compuesta por cerca de 150 empleados, que ya piensa en la expansión de una nueva planta, para meterse de lleno en la industria 4.0.
“Empezamos en el centro de San Juan del Río, en un pequeño taller en la calle 5 de Mayo, y de ahí nos venimos para acá, en el 84”, recordó el director general, al referirse a su actual ubicación en Ojo de Agua, comunidad cercana a la cabecera municipal sanjuanense.
EVOLUCIÓN
En la década de los 80, Richter de México abastecía a pequeñas ferreterías de la región, pero fue la consolidación de San Juan del Río como una ciudad industrial, lo que los llevó a sofisticar su producción y abastecer a las compañías automotrices, de refrigeración comercial y agrónomas que llegaban a la región.
El proceso no fue fácil, contó Rodríguez López; sin embargo, lograron los estándares de calidad que la industria les requirió para convertir a esta empresa en proveedora de corporativos trasnacionales.
“Nos empezó a llamar la atención el tema de la inyección de plásticos para atender el crecimiento de empresas que había en San Juan del Río. La calidad se fue incrementando, los modelos de calidad fueron siendo más gruesos y de ahí las inversiones de los equipos para poder dar la calidad requerida”. La empresa cuenta con la certificación ISO 9001:2015.
Actualmente, Richter cuenta entre sus clientes a compañías como Peterson Spring, Imbera, Helvex, Sika, Vinitec, Batz Mexicana, y Valeo North America Inc., por mencionar algunas.
Proveer a empresas trasnacionales como las enlistadas, le ha permitido a la compañía sanjuanense llevar sus productos fuera de México de manera indirecta, pues sus principales clientes exportan a regiones de EE.UU., Sudamérica y Europa.
“Tenemos una gran gama de productos. En el sector de refrigeración comercial tenemos cerca de 100 números de parte; en automotriz tendremos unos 20 o 30 números de parte; nos vamos al agrónomo, en el que tenemos varias piezas para invernaderos”, apuntó el directivo.
FUTURO
Richter de México ha logrado crecimientos considerables en el último lustro. Si bien 2019 ya no contó con el alza promedio de 25% que había reportado en años anteriores, logró mantener el crecimiento a dos dígitos.
“Generalmente son los clientes los que nos van poniendo la pauta de cómo ser más competitivos y las empresas grandes nos dictan cuáles son los caminos a seguir. La apertura siempre ha sido positiva para el crecimiento de la empresa”, apuntó Víctor Hugo.
Esta filosofía los ha llevado a una nueva meta: insertar su operación bajo los estándares de la industria 4.0. Para ello, ya prevén la apertura de una segunda planta que comenzaría su construcción este año, con el objetivo de operar a finales de 2021.
“[La planta] va enfocada a mejorar los equipos y a poner más tecnología en el sector de plástico, que tiene mucha competencia y muy fuerte. El plus que tenemos es que contamos con un taller, hacemos nuestros propios moldes, tenemos un laboratorio de metrología bastante bueno, que no cualquier empresa tiene y, sobre todo, equipos nuevos”.
El objetivo es que esta nueva sede atienda clientes y sectores con necesidades más complejas, por lo que la apertura requeriría de hasta un centenar de nuevos asociados altamente calificados.
“Sería una empresa donde pondríamos otros tipo de tecnología, robots periféricos ya más eficientes, lo que nos permitiría doblar la producción”, anticipó el directivo.
+INFO
Richter de México
Inicio de operaciones: 1984
Capital: mexicano
Giro: plásticos
Producto: diseño y manufactura de partes plásticas de acuerdo a requerimientos específicos
Ubicación: San Juan del Río, Querétaro
Sin embargo, la visión de su fundador, Sabino Rodríguez y su hijo, Víctor Hugo Rodríguez López, actual director general de Richter de México, los llevó a convertirse en una empresa compuesta por cerca de 150 empleados, que ya piensa en la expansión de una nueva planta, para meterse de lleno en la industria 4.0.
“Empezamos en el centro de San Juan del Río, en un pequeño taller en la calle 5 de Mayo, y de ahí nos venimos para acá, en el 84”, recordó el director general, al referirse a su actual ubicación en Ojo de Agua, comunidad cercana a la cabecera municipal sanjuanense.
EVOLUCIÓN
En la década de los 80, Richter de México abastecía a pequeñas ferreterías de la región, pero fue la consolidación de San Juan del Río como una ciudad industrial, lo que los llevó a sofisticar su producción y abastecer a las compañías automotrices, de refrigeración comercial y agrónomas que llegaban a la región.
El proceso no fue fácil, contó Rodríguez López; sin embargo, lograron los estándares de calidad que la industria les requirió para convertir a esta empresa en proveedora de corporativos trasnacionales.
“Nos empezó a llamar la atención el tema de la inyección de plásticos para atender el crecimiento de empresas que había en San Juan del Río. La calidad se fue incrementando, los modelos de calidad fueron siendo más gruesos y de ahí las inversiones de los equipos para poder dar la calidad requerida”. La empresa cuenta con la certificación ISO 9001:2015.
Actualmente, Richter cuenta entre sus clientes a compañías como Peterson Spring, Imbera, Helvex, Sika, Vinitec, Batz Mexicana, y Valeo North America Inc., por mencionar algunas.
Proveer a empresas trasnacionales como las enlistadas, le ha permitido a la compañía sanjuanense llevar sus productos fuera de México de manera indirecta, pues sus principales clientes exportan a regiones de EE.UU., Sudamérica y Europa.
“Tenemos una gran gama de productos. En el sector de refrigeración comercial tenemos cerca de 100 números de parte; en automotriz tendremos unos 20 o 30 números de parte; nos vamos al agrónomo, en el que tenemos varias piezas para invernaderos”, apuntó el directivo.
FUTURO
Richter de México ha logrado crecimientos considerables en el último lustro. Si bien 2019 ya no contó con el alza promedio de 25% que había reportado en años anteriores, logró mantener el crecimiento a dos dígitos.
“Generalmente son los clientes los que nos van poniendo la pauta de cómo ser más competitivos y las empresas grandes nos dictan cuáles son los caminos a seguir. La apertura siempre ha sido positiva para el crecimiento de la empresa”, apuntó Víctor Hugo.
Esta filosofía los ha llevado a una nueva meta: insertar su operación bajo los estándares de la industria 4.0. Para ello, ya prevén la apertura de una segunda planta que comenzaría su construcción este año, con el objetivo de operar a finales de 2021.
“[La planta] va enfocada a mejorar los equipos y a poner más tecnología en el sector de plástico, que tiene mucha competencia y muy fuerte. El plus que tenemos es que contamos con un taller, hacemos nuestros propios moldes, tenemos un laboratorio de metrología bastante bueno, que no cualquier empresa tiene y, sobre todo, equipos nuevos”.
El objetivo es que esta nueva sede atienda clientes y sectores con necesidades más complejas, por lo que la apertura requeriría de hasta un centenar de nuevos asociados altamente calificados.
“Sería una empresa donde pondríamos otros tipo de tecnología, robots periféricos ya más eficientes, lo que nos permitiría doblar la producción”, anticipó el directivo.
+INFO
Richter de México
Inicio de operaciones: 1984
Capital: mexicano
Giro: plásticos
Producto: diseño y manufactura de partes plásticas de acuerdo a requerimientos específicos
Ubicación: San Juan del Río, Querétaro