Los riesgos de proveeduría se han incrementado, no sólo por el aumento de la inflación, sino por la tensión comercial entre China y Estados Unidos, además de los problemas que dejó la pandemia y el conflicto entre Rusia y Ucrania, por lo cual las compañías buscan la manera de reducir esta problemática, en ese sentido, el nearshoring comienza a tomar fuerza como la solución a los riesgos y sobrecostos en las cadenas de suministro.
De acuerdo con información de la Oficina del Censo de Estados Unidos, hasta junio de este año, el comercio entre el vecino del norte y México tuvo exportaciones, estadounidenses, por más de 40,300 millones de dólares e importaciones por 30,000 millones de dólares.
Frente al dilema de replantear su logística, las organizaciones están adoptando esta tendencia, en la que establecen sus procesos de fabricación, ensamblaje o proveeduría en un lugar más cercano a su casa matriz reduciendo, con ello, el riesgo de sufrir interrupciones operativas y la dependencia de países como China.
Rafael Vásquez, vicepresidente regional de Value Services Coupa, comentó que en el sector automotriz se anticipa que estarán las mayores oportunidades de la relocalización de las empresas. Según datos de la Asociación Mexicana de Parques Industriales Privados se prevé la apertura de 25 parques industriales en los próximos 12 meses, lo que representa una inversión de 25,000 millones de dólares.
Lo anterior abre una gran ventana de oportunidad para las empresas nacionales, El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) estima que la relocalización de los centros de manufactura representa una oportunidad de 35,000 millones de dólares en nuevas exportaciones para México. Además, el país tiene ventajas competitivas que lo hacen atractivo para el intercambio comercial:
- Cercanía geográfica con Estados Unidos; factor que no han pasado por alto los importadores norteamericanos que ya han comenzado a buscar proveedores en este territorio.
- El T-MEC, el acuerdo comercial entre ambos países, que ofrece beneficios arancelarios atractivos para las compañías de ambos países.
- El bajo costo de la mano de obra que se paga en México, que comparado con los que se tienen en los lugares de origen de las grandes marcas y en los principales mercados mundiales, representan una reducción importante en términos operativos.
Tecnología: La ayuda que necesita
A su vez, mientras el nearshoring cobra mayor importancia, las empresas que quieran aprovechar esta tendencia deben estar preparadas, con tecnología y software, que les permita estar listas y optimizadas para afrontar el reto de atender el mercado estadounidense.
¿Cómo hacerlo? Con herramientas digitales con las cuales puedan unificar el diseño de su cadena de suministro y los procesos de planificación, como lo son compras, pagos y tesorería; todo en una única plataforma de gestión del gasto empresarial y basada en la nube.
La creación de modelos de distribución sigue siendo un factor que definirá el éxito o fracaso de una cadena de suministro, por lo cual es importante que se apoye de simuladores que analizan diferentes variables, a fin de identificar la mejor ruta para transportar mercancías.
“Cuanto más y mejor planifique y ejecute sus rutas de entrega obtendrá la confianza de sus clientes, además de que logrará tener ahorros de combustible, uso del vehículo y otros gastos relacionados con operación de su flota de distribución”.
Nada estaría completo sin el factor humano; por eso, es imprescindible que además invierta en la capacitación constante y actualizada de sus colaboradores, ya que entre mejor formación tengan, obtendrán mejores resultados de las herramientas tecnológicas que están disponibles.
Es así que la tecnología y el lado humano son factores que le ayudarán a maximizar sus oportunidades de ser parte de una eficiente relocalización de los centros de manufactura de las empresas. Con todo esto, el nearshoring se vislumbra como un respiro para la economía del país y sus empresas de cara a los próximos años.