El uso de robots como servicio o la robóticacomo servicio (RaaS) es una unidad del cloud computing que facilita la integración de robots y dispositivos en el entorno web y de computación en la nube.
Lo anterior, puede representarse por medio de una combinación de servicios compartidos y transformaciones digitales; de acuerdo con expertos, hoy en día los servicios compartidos son más utilizados y populares en diversas industrias debido a la rentabilidad que representa y su facilidad de implementación.
La combinación de servicios compartidos y transformación digital brinda la oportunidad de aplicar la robótica como servicio, es así como la RaaS está sustituyendo poco a poco los servicios tradicionales.
El término RaaS se deriva del nombre que otros servicios brindan dentro de la nube, es decir, el software como servicio (SaaS). El objetivo en común es que las organizaciones se desprendan de automatizar manualmente algunos o todos sus procesos, aplicando inteligencia artificial.
Especialistas y empresas explican las ventajas de la robótica como servicio para las organizaciones a nivel global y la razón por la cual hay más aceptación, debido a que a lo largo de los años, su implementación es más corta y económica en comparación con otras soluciones tecnológicas, así como los costos de inversión iniciales son cada vez más accesibles, incluso para las medianas y pequeñas empresas.
LOS ROBOTS COMO PROPUESTA DE VALOR
Daniel Theobald, fundador de VECNA Robotics, explicó que la propuesta de valor de los robots como servicio suele ser abrumadora aún para muchas empresas a nivel global; sin embargo, están tomando en cuenta esta opción debido a las exigencias de preservar el medioambiente mediante la automatización de procesos, especialmente en la industria logística, en donde la mayoría de las empresas de transporte eligen planear sus entregas por medio de robots y de esta manera reducir la huella de carbono.
Dijo que otro aspecto que les limita a tomar una decisión respecto a los robots como servicio es que el acceso al capital para solventar el costo les resultaba insostenible; no obstante, el costo de RaaS puede realizarse con base en el presupuesto operativo en lugar de utilizar los gastos de capital.
Añadió que una de las propuestas recurrentes de la industria es siempre basarse en la resiliencia y lograr conseguir la capacidad para administrar un negocio de manera confiable.
“Sabemos que la mano de obra en conjunto con la automatización ha sido uno de los desafíos más grandes de los últimos cinco años, pese a que hay muchas empresas que están implementando una gran cantidad de robots reemplazando la mano de obra, pero no se trata de eso, se trata de empoderar a sus colaboradores haciéndolos más productivos haciendo uso de la tecnología”, explicó.
Cameron Waite, fundador y CEO de Real Life Robotics, opinó que entre los beneficios que existen para el proveedor de RaaS, es que se mejora y se perfecciona dependiendo de las necesidades de los clientes, se construye poco a poco una relación a largo plazo, por ello, es necesario conocer las necesidades de la industria en general, independientemente de dónde esté situada la compañía que necesite este servicio.
“Al final del día, la empresa obtiene también el beneficio de amoldar y adecuar sus procesos y hacerlos cada vez más automatizados, con esto garantizan su permanencia en el mercado, sin importar si se trata de una empresa grande, mediana o pequeña”, añadió.
Dijo que la mayoría de las empresas que ya cuentan con una implementación automatizada mediante un software, robots o ambos, deben conocer el nivel de madurez que han alcanzado.
“La mayoría de los clientes solicitan soluciones que estén enfocadas a mitigar riesgos, pero se sienten inseguros a la hora de invertir o tener un compromiso a largo plazo para implementar una nueva tecnología, por ello siempre piden que se les garantice el rendimiento de su RaaS y se les dé una perspectiva para su retorno de inversión”, añadió.
AVANCES DE LA AUTOMATIZACIÓN EN EL MUNDO
Jordan Kretchmer, CEO de Rapid Robotics, manifestó que al menos en Norteamérica, que es en donde esta industria se encuentra más avanzada, el 75% de las implementaciones de RaaS implica un gasto de capital de 250,000 dólares anuales para implementar un solo robot; no obstante, en la mayoría de los casos la mano de obra que realiza este mismo proceso les supone un gasto de hasta 500,000 dólares al año.
Refirió que lo que la mayoría de los clientes no tienen en cuenta, especialmente los compradores o integradores robóticos, es que además hay costos de mantenimiento y, por ende, debe existir una buena administración del recurso cuando el robot comience a operar de manera inadecuada.
Ejemplificó que el costo total de un RaaS durante 10 años podría ser de aproximadamente 1.2 mdd frente a los 1.9 mdd que implica ese mismo proceso por medio de mano de obra.
“Existen empresas que cubren los servicios que se brindan posterior a la instalación y los reemplazos de equipo. Falta aún mucha sensibilización de las empresas respecto a que esto no va a sustituir la mano de obra como tal, pero sí va a ofrecer valor a sus procesos y más precisión, lo cual hará más rentable cualquier producto que estén fabricando”, comentó.
Reiteró que la mayoría de las empresas comienzan a necesitar de RaaS cuando se encuentran presionadas por alcanzar sus objetivos de producción; sin embargo, deben evaluar si están dispuestas a comprometerse en una inversión a largo plazo y cuestionar si tiene sentido instaurar robots en sus líneas de operación.
RETOS Y OPORTUNIDADES DEL RaaS
Kait Peterson, directora senior de marketing de producto en Locus Robotics, dijo que este tipo de servicios favorece a las empresas en el sentido de conocer el estatus de sus operaciones en tiempo real, pues conocen a tiempo cuáles reemplazos deberán realizarse, en qué procesos hacen falta ajustes; no obstante, advirtió que no es sólo obtener el robot como tal, sino saberlo conectar con las personas.
“Anteriormente, las empresas contrataban servicios de robots para sus procesos, pero terminaban en una pila de metales inservibles al no conocer cómo podrían darles mantenimiento o hacia qué proceso podrían ser redirigidos, por ello, es necesario que conozcan sus fortalezas y áreas de oportunidad, las empaten con las exigencias de la industria global y comiencen a subirse a este tren de la automatización lo antes posible con todos los conocimientos que implica, pues hoy, más que nunca, esto asegurará su permanencia”, añadió.
Algunos de los desafíos que la experta identifica como tendencia, es que los proveedores de RaaS busquen satisfacer la extensibilidad de las empresas, es decir, cubrir lo que están buscando, pues no es solo centrarse en la cantidad de robots o la automatización, sino de evaluar las capacidades y modelos que existen en el mercado en cuanto a robótica.
Otro reto es que las empresas se preguntan cómo hacer más con menos, cómo mantener sus operaciones sin detenerlas por largos periodos de tiempo, si será necesario reestructurar su operación o la automatización con la que ya cuenta.
“Una pregunta recurrente en la industria a nivel global es cómo mantener la operación funcionando, cómo reducir la huella de carbono, cómo mejorar mi logística, cómo introducir nuevas tecnologías para mejorar mi eficiencia sin eliminar mano de obra. Hoy en día, los tomadores de decisiones ya no son solo los encargados de piso o los encargados de la operación de la empresa, sino también el CEO, es una decisión conjunta”, concluyó.