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A través del webinar “Coaching para alineación de equipos en la nueva normalidad”, Iliana Juárez, coach & facilitadora de la empresa Training and More, ofreció consejos a miembros de la Cámara de Comercio de Canadá (Cancham) en México, para que las empresas creen ambientes laborales y estrategias que ayuden a sus colaboradores a transitar a las nuevas modalidades que trajo la pandemia.
Primeramente, explicó que el coaching no es una mentoría, entrenamiento o terapia para condicionar la vida de alguien, sino una metodología que facilita la adaptación a nuevas circunstancias.
“Ya tuvimos un momento de cambio con el home office. Hemos pasado por emociones, miedo, confusión, incertidumbre y con esos sentimientos regresamos al trabajo”, expresó la ponente.
Por ello, apuntó que el éxito del coaching radica en infundir autoconfianza, “que conduce a grados elevados de motivación y desempeño”.
En este sentido, instó a los encargados de los diferentes departamentos de las compañías a hacer diagnósticos sobre cómo regresan sus colaboradores a los espacios de trabajo, pues el proceso de confinamiento puede producir problemas de desempeño y comportamiento.
Fue entonces que enumeró las características de un “coaching efectivo”:
• Escuchar mucho
• Preguntar
• Inspirar
• Analizar
• Buscar compromiso
• Desafiar
• Buscar resultados
• Hacer contacto
HERRAMIENTAS
Estas estrategias, que deben ejecutar los líderes, se dirigen a los empleados, con el fin de darles herramientas para alinear al equipo hacia la “nueva normalidad”, con el menor estrés posible.
“Debe haber apoyo, empatía. Tener la capacidad de generar conexión emocional con el otro a través del lenguaje verbal y no verbal”, expuso Iliana Juárez.
Habló además de la “escucha sagrada”, concepto que los coaches utilizan para que colaboradores y líderes interactúen y obtengan significados profundos de sus pares. A través de la escucha, aseguró, “le das a los otros la capacidad de encontrar sus propias respuestas. El coach no tiene respuestas, tiene preguntas que generan reflexión y cambio”, sostuvo.
Asimismo, explicó la importancia del manejo emocional, el cual permite la “creación de estados”, como la generación de la autoconciencia y la búsqueda de la motivación real.
“Se deben alinear la visión, que son los significados, con la misión, los desempeños. Se genera así la autorrealización”.
Lo anterior con el objetivo de capitalizar las tres fuerzas que motivan a los colaboradores: la necesidad de alcanzar logros (metas), deseo vehemente de aprender y el anhelo de contribuir (aportar valor, significado).
La retroalimentación fue otro de los conceptos que la ponente abordó. Para lograr un feedback constructivo, ofreció una técnica que comprende el sentido de oportunidad (saber cuándo hacerla), que esta se fundamente en hechos y datos observables, debe ser clara y sincera, además de directa (cara a cara). Esta retroalimentación debe generar un compromiso de los involucrados.
“Los jefes, coordinadores y líderes deben aprender a recibir retroalimentación”, agregó.
Finalmente, enfatizó que para generar y acompañar los cambios se deben considerar los siguientes puntos:
• Reconocer y diagnosticar el estado actual (de la compañía, procesos e involucrados)
• Definir el estado deseado
• Generar las estrategias para transitar el cambio en una forma efectiva
• Valorar recursos internos y externos
• Determinar la forma de evaluación y seguimiento
