Sin importar el tamaño de la empresa, dirigir una siempre es un reto, tanto para mantenerla y hacerla crecer como para convertirla en una fuente importante de empleo.
Para tener una buena gestión y administración de una compañía y contar con procesos eficientes se requiere una buena organización, planeación, dirección y control de todos los recursos con los que se cuenta, tanto económicos, como físicos y humanos.
El primer paso es tener claridad sobre las metas de negocios que se quieren alcanzar. Posteriormente, hay que pensar y desarrollar la identidad de la organización, así como sus elementos base, es decir, visión, misión, propósitos, políticas, programas, procedimientos, presupuestos, entre otros. Y como tercer paso, contar con una estructura para poder organizar y alinear las responsabilidades del puesto de cada persona que conforma la empresa.
Una vez que se tienen estos básicos, como yo les llamo, en OCCMundial damos una serie de recomendaciones para tener una mejor gestión de tu empresa:
- Cuidar al capital humano. Siempre hemos dicho que uno de los activos más valiosos de las empresas son los colaboradores. Tras formar al equipo adecuado, hay que mantenerlo y cuidarlo a través de un buen clima organizacional que permita su crecimiento y desarrollo.
- Establecer objetivos y crear un plan de acción. Es importante saber cuál es la meta a alcanzar y, para ello, es importante diseñar el proceso para lograrlo. Lo primero que debes hacer es establecer los objetivos del negocio y desarrollar la metodología para alcanzarlos.
- Analizar la información relevante para el negocio. Recomendamos revisar la información que tengamos a la mano para tener claridad de la empresa y del entorno, es decir, checar las necesidades y las herramientas que necesitamos. Para ello se puede realizar un análisis FODA de la compañía con el objetivo de identificar las Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas.
- Establecer procesos. Establecer los pasos, los recursos y los responsables o encargados de ciertas áreas o actividades ayudará a la gestión de la empresa, incluyendo el tiempo de la misma, además de ser un apoyo para cuidar la calidad de los servicios y/o productos que ofrecemos a nuestros clientes. Esto, además, ayudará a disminuir los errores.
- Llevar un control. Para tener claridad, es importante llevar a cabo un control de empleados, de insumos, de egresos, de ingresos, de pérdidas, de todo. La correcta administración de los recursos y realizar un inventario controlado y actualizado facilitará la gestión de tu empresa.
Por último, es importante aprovechar las herramientas tecnológicas para aumentar la eficiencia y productividad del negocio. La transformación digital implica tomar acciones aprovechando las ventajas que ofrecen las nuevas tecnologías, desde la digitalización documental hasta el Big Data o el marketing digital. Además de otros beneficios como abrir fronteras, permitir el conocimiento del cliente, mejorar la reputación organizacional, aumentar los ingresos, fomentar el trabajo en equipo, entre otras.