El documento fiscal Carta Porte se ha convertido en un gran reto entre los transportistas de México quienes demandan mejores herramientas, esquemas digitales y plataformas de revisión en los sistemas aduaneros.
Ante diversos conflictos que han enfrentado para obtenerla, validarla o generar cambios durante la cadena de suministros; desde enero del 2024, este trámite se ha vuelto obligatorio, y en él, debe especificarse el tipo de mercancía que se transporta, la ruta, origen y su destino.
En opinión de Mauricio Alberto Barrientos Rodríguez, socio director de AJR Logistics Solutions, la Carta Porte es una exigencia de las autoridades mexicanas para fomentar practicas legales en el sector empresarial, pero en el primer bimestre de este año, su implementación ha logrado evidenciar diversas áreas de oportunidad.
Entre ellas habló sobre la falta de información para que la carta porte sea accesible, el uso de tecnología entre el sector transportista, la coordinación de autoridades con el sector productivo, además de las fallas en las aduanas.
“Definitivamente la implementación de la carta porte es todo un reto en el sector logístico, y debe ponerse entre las prioridades del 2024, ya que en lugar de convertirse en una herramienta de facilitación, se ha traducido en problemas; uno de los aspectos que preocupa es que no hay opción para cambios, requiere de datos muy precisos, algunos por ejemplo de valores y costos que dan pie a más dudas”.
El Servicio de Administración Tributaria (SAT) dio a conocer en mayo del 2021 el formato Carta Porte, y en junio entró en vigor como uso opcional, luego en septiembre del 2023 se publicó la documentación técnica de la versión 3.0 del complemento y en noviembre dio inicio la vigencia de esta versión.
Por ello en enero, el SAT declaró como obligatoria su utilización en los procesos comerciales, con multas y sanciones para quienes no la presentaran.
“De parte de la autoridad hace falta difusión para que los transportistas puedan conocer sobre las bondades o beneficios que trae este documento, pero también del sector empresarial hay pendientes, como el dotar de herramientas tecnológicas al transportista que garanticen un correcto seguimiento a los procesos”.
La obligatoriedad de la Carta Porte aplica para toda la mercancía en México, ya sea vía carretera, marítima, aérea o ferroviaria.
Aunque también hay algunas excepciones en base a las condiciones de operatividad en las empresas, lo que conlleva dudas, explicó por su parte, el agente aduanal Alain de León Cortinas.
“A pesar de que hubo un tiempo de adecuación para la puesta en marcha de la Carga Porte, la falta de preparación de los transportistas complicó su funcionamiento y aplicación; en las plataformas del SAT existe mucha información, pero la experiencia que tuvimos fue que la mayoría de las empresas lo dejó al final, e incluso no sabían del requisito, todavía ahora hay quienes lo pasan desapercibido, pese a que ya existen sanciones económicas”.
En entrevista con Mexico Industry, de León destacó que la Carta Porte es un formato que brinda certeza legal a las empresas, y que una de sus principales ventajas es el no poder alterar información inmediata, por ello, el cambiar ruta o nombre de conductor, es parte de un proceso administrativo respaldado por el SAT.
“Esto se hace para evitar contrabandos, las autoridades revisan antes de cualquier proceso de entrega que las mercancías declaradas y la información del transportista coincida, también que las unidades estén en las rutas, sin alteraciones”.
Sin embargo, consideró importante que se amplíen las herramientas informativas para que la utilización de este documento sirva como parte de un proceso de eficiencia logística y no de retraso.
Aduanas eficientes
Entre la implementación de la carta porte, en los últimos días los transportistas han tenido que atravesar otros retos, que van relacionados al funcionamiento del sistema aduanal.
La caída reciente de los sistemas de la Agencia Nacional de Aduanas de México (ANAM) con filas kilométricas en puentes internacionales y unidades de carga varadas, dan muestra de ello, agregó de León.
“La carta porte nos hace dependientes de la tecnología, y evidencia que las autoridades necesitan sistemas robustos en las aduanas para atender toda la demanda comercial dentro y fuera de México; en días pasados tuvimos una caída que afectó miles de operaciones, está más que claro que es un área de oportunidad y que se necesita infraestructura tecnológica adecuada para evitar que se repita”.
Barrientos, por su parte, coincidió en la necesidad de modernizar el sistema de aduanas, y habló sobre la urgencia de generar mayor coordinación entre la ANAM y el SAT, en vías de agilizar los procesos de comercio exterior.
“No podemos tener unidades comerciales detenidas en ninguna parte del país, lo que ocurrió en los puentes internacionales de toda la frontera es un llamado urgente a reforzar la tecnología y los procesos que se llevan en las aduanas, esto solo se puede lograr con una coordinación entre ambas dependencias”.
