El
año 2020 está la vuelta de la esquina y estamos en un punto casi de fiesta por
la celebración de fin de año. Todos deseamos ser mejores y con buenos
propósitos para este ciclo que viene.
Sin
embargo, ¿qué pasará en al ámbito logístico e industrial? Por un lado, estamos
esperando que la economía repunte, lo cual se espera sea después de la firma de
T-MEC.
Las
inversiones seguramente vendrán en cascada y todos estamos esperanzados que así
sea para impulsar nuestros negocios, servicios y venta de productos.
¿Qué
tanto nos estamos preparando para el nuevo ciclo? Ya le dimos sus “vitaminas” a
nuestras empresas, una que es vital para eficientar las operaciones son las certificaciones
de seguridad y calidad de las empresas que brindan servicios, especialmente las
logísticas.
Muchas
veces en las que he hablado del tema de la importancia de certificar a las
empresas me he topado con comentarios del tipo “es solo un papel más” cuesta
mucho dinero y tiempo, tenemos otras prioridades, etcétera.
Pero
¿entonces solo queremos dar servicios a cierto tipo de mercado que solo pelea
el precio de un servicio? ¿a dónde voy con este comentario? Las empresas
sólidas y que siguen en crecimiento cuentan con certificaciones como ISO 2800,
14000, certificación en logística justa para las empresas de este ramo, así
como municipios logísticos y parques industriales que solo las puede otorgar la
Organización Mundial de Ciudades y Plataformas Logísticas (OMCPL), y el
Operador Economico Autorizado (OEA) que otorga el SAT, entre otras.
¿Por
qué me enfoco en este tipo de certificaciones? El tema que no es negociable en
el T-MEC es el de seguridad en la cadena logística, quien realmente esté
preparado con los procesos antes mencionados tendrá oportunidad de ganar
mercado.
Para
ser consideradas como parte del T-MEC, las empresas de Nuevo León, Coahuila y
Tamaulipas y en general los centros de producción en México, tienen que
certificarse o quedarán fuera del comercio internacional.
Para
el próximo año se espera que se destrabe el comercio internacional y vamos a
querer certificarnos al cuarto a las doce, perdiendo la posibilidad de ganar
contratos, ya que muchas empresas solo quieren trabajar con empresas
certificadas.
Creo
que es momento de poner en forma a las empresas y darles esta ventaja
competitiva, que sin duda les inyectará la energía necesaria para continuar en
este juego de logística y comercio internacional.
¿Y
tu empresa, ya comenzó con su vitamina?
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