Stellantis anunció que la producción en masa de vehículos comerciales ligeros Peugeot, Citroën y Opel en Hordain, Francia, en una versión impulsada por hidrógeno equipada con una celda de combustible.
El CEO de Stellantis, Carlos Tavares, manifestó que se encuentra orgulloso del trabajo realizado por la gerencia y los empleados quienes han hecho de su sitio el primero en el mundo en combinar tres tipos de energía, hecho posible gracias a la flexibilidad de nuestro sistema de fabricación.
“El anuncio de hoy demuestra el compromiso de Stellantis de invertir en Francia en las últimas tecnologías y de apoyar la movilidad baja en carbono basada en el principio 'One Company. Stellantis ha logrado pasar al siguiente paso en la historia del automóvil, en una transición gestionada junto con nuestros socios sociales en nuestros 12 sitios industriales en siete regiones francesas, donde estamos orgullosos de haber echado raíces históricas”.
Estos vehículos propulsados por hidrógeno se ensamblarán en la línea multienergía del sitio, que ya produce diariamente las versiones eléctricas y de combustión del “K-Zero”.
Utilizando una plataforma reforzada a partir de la carrocería en blanco, los modelos propulsados por hidrógeno seguirán las etapas habituales de pintura y montaje, en la misma línea de producción que los vehículos de motor de combustión y eléctricos, antes de ingresar a las nuevas instalaciones de 8.000 metros cuadrados que se centra únicamente en la afinación final.
Un equipo dedicado instalará el tanque, las baterías adicionales y la celda de combustible en una línea de producción que reduce a la mitad el tiempo de ajuste en comparación con el proceso a pequeña escala anterior, donde la celda de combustible se ensambló en un taller piloto en Rüsselsheim.
Esta industrialización de los vehículos comerciales ligeros propulsados por hidrógeno –acompañada de una inversión de 10 millones de euros con el apoyo financiero del gobierno francés– es un nuevo paso para Hordain, donde el 43% de los modelos de Peugeot, Citroën, Opel, Vauxhall, Fiat y Toyota, las marcas ya están disponibles en una versión eléctrica cero emisiones.
Los vehículos “K-Zero” con pila de combustible están destinados a los profesionales del transporte de larga distancia que requieren una mayor autonomía, el tiempo de carga más rápido posible y no comprometer la capacidad de carga.
Lanzado en 2021, Stellantis es el primer fabricante del mundo en comercializar este tipo de vehículos.