México y Japón comparten una larga historia de comercio, cooperación y amistad. Japón es uno de los principales países que ha encontrado en México un aliado estratégico de negocios. Takao Nakahata, director general de Jetro México, platicó con Mexico Industry sobre cuál es la situación actual y hacia dónde va esta relación bilateral.

Actualmente, ¿cómo se encuentra la relación comercial entre México y Japón?

En los últimos 20 años ha crecido la relación económica entre Japón y México. A partir del 2005, tras la entrada en vigor del Acuerdo para el Fortalecimiento de la Asociación Económica entre México y Japón (AAEMJ), la relación ha aumentado. Del 2005 al 2022 se duplicó el número de empresas japonesas. Este tratado sirve mucho para que los empresarios mexicanos exporten sus productos. También, ha permitido que crezca la inversión japonesa en México, sobre todo en el sector automotriz. 

Sin embargo, en los últimos cinco años ha bajado la ola de inversión japonesa a México. Después de la llegada de Donald Trump y sus declaraciones sobre aumentar los aranceles en 2018, la pandemia en 2020 y la falta de semiconductores afectaron la llegada de nuevas inversiones japonesas a México, pero ya está cambiando poco a poco, sobre todo ahora, con el concepto de nearshoring y friendshoring.

Este concepto de nearshoring cambió drásticamente la inversión extranjera en México, empresas estadounidenses, chinas y coreanas han invertido en 2022, pero lamentablemente las empresas japonesas aún no tanto, pero ya se dieron cuenta de que otros países lo están haciendo, entonces, a partir de la segunda mitad de 2022, los empresarios japoneses han empezado a hacer estudios de factibilidad para expandir o abrir una nueva planta, principalmente el interés es del sector automotriz. Esta tendencia en electromovilidad provocará grandes inversiones por las nuevas líneas de producción que surgirán. 

¿Qué fortalezas o ventajas estratégicas hay en México? ¿Qué características y condiciones son importantes para que los fabricantes se desarrollen en el país?

Su principal ventaja es su ubicación geográfica con Estados Unidos, que sirve como un punto estratégico; otra es su mano de obra. También, cuenta con dos grandes océanos que le sirven para importar insumos desde Asia y otro para exportar sus productos a Europa.

No hay que dejar de lado que su mano de obra es competitiva y a gran volumen, es lo primero que un inversionista japonés revisa en el país para la industria manufacturera y aquí no existe esa preocupación. 

Otra de sus virtudes es su participación en el Tratado de Libre Comercio, ya que el país no sufre de tener aranceles tan altos. 

Una de las características importantes de México es su economía, ya que no tienen tantas restricciones y hay un tipo de cambio accesible, pero también, a veces hacen faltan algunos incentivos para atraer inversiones, o políticas ambientales o de neutralidad de carbono, que le importan a las empresas de clase mundial para desarrollar sus proyectos.

¿Qué sector y estados han sido más atractivos para la inversión japonesa?

El Bajío es de las zonas más interesantes para la industria japonesa por su competitividad, incluso para la exportación de autopartes a Estados Unidos y por su avance en otras industrias. En Japón están analizando todo el tiempo a las diferentes regiones del mundo para desarrollar nuevos proyectos y esta zona del país es una de las más relevantes, ya que en ella o a sus alrededores hay plantas automotrices de origen japonés.

¿En qué otros sectores ven oportunidades de crecimiento en la relación de México y Japón?

En la industria de manufactura se están viendo oportunidades de los dispositivos médicos para empresas trasnacionales que existen en Japón. Algunas empresas asiáticas tienen bastante participación en el mercado mexicano.

La industria aeroespacial también está teniendo un crecimiento importante, por el momento algunas empresas de Japón están exportando componentes de este tipo a México, pero todavía no hay ninguna de ellas que se pueda instalar en México por el momento; sin embargo, las posibilidades son grandes para que en el mediano plazo podamos ver un proyecto de esta índole en tierras mexicanas.

Los productos de consumo como papelería, cosméticos o detergentes de algunas empresas japonesas son muy fuertes, pero ese tipo de negocios aún no están en América Latina y veo que hay grandes expectativas para ese mercado.

La comida japonesa también tiene un gran potencial de negocio en México, ya que la carne wagyu es un producto muy buscado por el mercado estadounidense.

¿Qué estrategias están utilizando para aumentar la relación binacional?

Ya hablamos de que la carne wagyu que tiene oportunidad de mercado, pero también estamos impulsando la ginebra, sake y whisky japonés. 

La electromovilidad y algunas empresas innovadoras mexicanas en tecnología de agricultura, ya que el país asiático es mucho más pequeño que México y no tiene tantas tierras para practicarla, sin dejar de lado que la población en Japón tiene más ancianos que jóvenes y no hay quien la practique. 

En México existen muchos empresarios de esta industria y estamos invitándolos para elaborar proyectos de este tipo y ayuda mucho que tengan una gran tecnología para su desarrollo.

Jetro es un organismo del gobierno de Japón que trabaja para promover el comercio y las inversiones entre Japón y el resto del mundo, así como para apoyar a las empresas japonesas con sus negocios en el extranjero.

¿Cuáles son sus perspectivas de crecimiento?

México tiene mucho potencial, va viento en popa atrayendo inversión extranjera directa. Las políticas actuales deben de cambiar para cuidar a los empresarios y dejar de considerarlos enemigos. Se deben crear más estrategias para fomentar la actividad económica y crear más empleos. Si se incentiva la inversión, por ejemplo, en electromovilidad, se va a tener más éxito.

Un claro ejemplo es Estados Unidos, que tiene incentivos económicos para proyectos, como los semiconductores, y el presidente Joe Biden tiene las adecuadas políticas para incentivarlas.

Para Japón, México es su principal socio comercial en América Latina, incluso por arriba de Brasil.

Asimismo, existe la posibilidad de crear algunos proyectos de hidrógeno verde en el país. Esta tecnología tiene bastante fuerza y desarrollo tecnológico en Japón por su alta demanda para las nuevas tendencias de la industria por su alto grado de capacidad en recursos naturales como sol, viento, entre otros. El objetivo de Japón es contribuir con la transición energética de México.

Takao Nakahata

Es director general de Jetro México. Cuenta con estudios de licenciatura de Estudios Hispánicos por la Universidad de Sofía en Tokio y un diploma por la Universidad Complutense de Madrid. Se especializa en la economía e industria de México y América Latina. También es presidente del Comité de Asuntos Fiscales y Aduanales, así como presidente del Comité de Estudios Económicos de la Cámara Japonesa de Comercio e Industria de México.