El gobierno de Francia, en conjunto con autoridades federales y estatales de México, así como con organismos industriales, establecieron un acuerdo de cooperación denominado Alianza Industrial Franco-Mexicana.
A través de esta sinergia, laboratorios, universidades e institutos tecnológicos mexicanos podrán obtener transferencias de tecnología de organismos privados y públicos de Francia, con el fin de integrarlas de manera directa con compañías establecidas en la república mexicana.
Alfred Rodríguez, embajador en México de la Alianza para la Industria del Futuro de Francia, resaltó, a través de una conferencia virtual, que la iniciativa que representa parte de la visión, modelo, valores y objetivos de los 22 sectores industriales que tiene el país galo.
“Cada uno de los sectores establecieron y estudiaron su visión, pusieron metas en el futuro, dijeron cuántos empleos iban a crear, qué valor económico iban a generar y es a partir de ahí que definitivamente se pudo enfrentar la cuarta revolución industrial”, sostuvo el diplomático.
Rodríguez señaló que el ser humano está al centro de dicha política industrial, pues “los cambios tecnológicos de la cuarta revolución industrial no se originan por un tema tecnológico, es un tema de política pública y sobre todo de política educativa. No cofundamos los objetivos con los medios; la tecnología es un medio para alcanzar el objetivo […] La aplicación de nuevas tecnologías elimina los oficios de ciclos repetitivos de la manufactura, que generan rápido desgate físico de los trabajadores”.
En este sentido, el diplomático aseguró que la política industrial de su país busca proteger a los empleados y no a los oficios mecánicos. Por ello, el modelo francés apuesta por ofrecer nuevas competencias tecnológicas al capital humano.
Dicha reconversión, que es el corazón de la Alianza para la Industria del Futuro, se ejecuta, en México y en nueve países más: Italia, Alemania, Corea del Sur, China, Japón, Rusia, Canadá y EE.UU.
ESTRATEGIA
El convenio de cooperación con la nación mexicana se firmó el año pasado, con la representación del gobierno y la industria mexicana, personificada esta por la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos.
El presidente de dicho organismo, Francisco Cervantes, se refirió a las fortalezas que encontraron en la propuesta, a la que se sumaron las 124 cámaras y organizaciones empresariales que representa.
“Es únicamente a partir de la voz de la industria que el sistema educativo podrá formar los nuevos talentos que requiera esta”, sostuvo el líder del empresariado mexicano.
INFRAESTRUCTURA
Esteban Moctezuma, secretario de Educación federal, recordó que la semilla de la alianza entre Francia y Mexico se sembró en un foro de aeronáutica celebrado el año pasado en Querétaro.
En aquel encuentro se reunieron 10 universidades tecnológicas y politécnicas de todo el país que contaban con programas educativos vinculados al sector aeroespacial.
La matrícula de estas instituciones superaba los 21,000 estudiantes en conjunto, así como los 66,000 egresados y casi 1,500 profesores articulados en 45 cuerpos académicos y de investigación.
Para reforzar esta oferta, añadió Moctezuma, se crearon 10 laboratorios, en mismo números de estados. La inversión para concretar esta infraestructura fue compartida entre el gobierno federal y los estados de Baja California, Chihuahua, Estado de México, Hidalgo, Nuevo León, Querétaro, Sonora y Yucatán, entidades sedes de estos espacios.
Se creó así la Red de Laboratorios Académicos de Innovación, Diseño y Manufactura Digital, para afianzar las capacitaciones de los futuros ingenieros y técnicos superiores universitarios en áreas como diseño y modelado 3D, ingeniería inversa, manufactura aditiva, inspección y validación de producto por realidad virtual, simulación y optimización topológica, entre otras capacidades.
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