Ford anunció los nuevos pasos para asegurar el suministro de acero con bajo contenido de carbono para sus productos futuros y ayudar a alcanzar su objetivo de neutralidad de carbono para 2035.
La compañía está firmando un Memorando de Entendimiento (MoU) con Salzgitter Flachstahl GmbH, Tata Steel Nederland BV y ThyssenKrupp Steel Europe AG para garantizar el suministro de acero con bajo contenido de carbono.
Los tres proveedores estratégicos de Ford tienen planes individuales para aumentar la producción de acero bajo en carbono en los próximos años. Sobre la base de las sólidas relaciones con estos socios, la marca norteamericana mejorará significativamente la huella de CO2 de su cadena de suministro, siendo la producción de acero un componente clave.
Como primera aplicación, Ford planea utilizar el acero con bajo contenido de CO2 para la producción de su nuevo vehículo crossover de tamaño mediano, totalmente eléctrico, a partir de 2023.
La reducción de las emisiones de CO2 en la cadena de suministro es un elemento clave en el plan de Ford para alcanzar la neutralidad de carbono en toda su huella europea de instalaciones, logística y proveedores para 2035.
Para lograr este objetivo, la marca está analizando toda la cadena de valor para producir productos altamente vehículos eficientes. Las importantes actualizaciones de las instalaciones de producción del Centro de Electrificación de Colonia, con nuevas soluciones de eficiencia energética, ahorrarán más de 2000 toneladas de CO 2 y más de 2600 MWh de energía eléctrica al año.
La iniciativa también contribuirá al compromiso de la compañía de un 10% de uso de acero carbono neutral para 2030 a partir de principios de este año, anunciado cuando Ford se unió a First Movers Coalition, una iniciativa global del Foro Económico Mundial para aprovechar el poder adquisitivo y las cadenas de suministro para crear mercados tempranos para tecnologías innovadoras de energía limpia.
Las siderúrgicas utilizarán hidrógeno verde y energías renovables en nuevos procesos productivos para reducir progresivamente su huella de CO2 en la producción de acero. De esta forma, contribuirán al Pacto Verde Europeo para lograr cero emisiones netas en todos los sectores en 2050.
