Las
empresas transnacionales deben acreditar que cumplen con diversos criterios,
por ello, solicitan a sus socios, proveedores y aliados que también hagan
propio estándar. A su vez, las Pymes nacionales, para seguir siendo elegibles
por las empresas globales, no solo se integran al modelo, sino que, igualmente,
lo exigen a las empresas con las que mantienen sus principales relaciones
comerciales.
Para
hablar de este efecto multiplicador del Compliance, Moisés Flores, director y
Luis Luján, socio de Basham Ringe y
Correa, explicaron que como parte de una firma mundial de bufetes de abogados
independientes se abocan a explicar a las Pymes los retos a enfrentar dentro de
la proveeduría, principalmente del sector automotriz.
Al
respecto, Moisés Flores, director de Basham Ringe y Correa, dio a conocer que
el Compliance Program surge a partir de la internacionalización y la
globalización, pues el hecho de que México y en general toda la región Bajío,
no se puedan quedar al margen de esta dinámica, ha conllevado a que la
legislación no tenga fronteras.
“Muchas
de nuestras leyes recientes obedecen a esta tendencia internacional, uno de los
puntos clave sería el Compliance, que si bien, ya tiene algunos años, ha
cobrado aún mayor relevancia precisamente por las nueva legislación en el país
donde aquella empresa que no se alinee o incluya este tipo de procesos y
sistemas en la organización, tendría un riesgo alto de sufrir sanciones”,
detalló.
Reveló
que hacer uso del Compliance mejora los procesos y mitiga los riesgos por
posibles malas prácticas en materia de anticompetencia, lavando de dinero y
anticorrupción, por ejemplo.
“Es
recomendable que las empresas procuren incluir un sistema de compliance en su
organigrama con un oficial de cumplimiento, y que esta persona o equipo de
personas se asesoren con terceros expertos o especialistas en la materia, toda
vez que el compliance es basto y multidisciplinario, abarcando áreas como:
corporativo, contractual, penal, laboral, fiscal, comercio exterior, entre
otros.
Reiteró
que las empresas que no implementen estos sistemas pueden incurrir en falta de
cumplimiento en normatividad, máxime que
en México se registra un alto número de regulaciones y leyes, lo que pudiera
provocar que las organizaciones estén en riesgo y esto genere que se les
impongan sanciones tanto económicas como en materia penal provocando que su
reputación e imagen se vean menoscabadas.
¿QUÉ ES EL COMPLIANCE PROGRAM?
El
Compliance es la aplicación de esquemas de organización, autorregulación y
gestión empresarial encaminados a configurar una persona jurídica sólida y
sustentada en la legalidad.
Seguir
adecuadamente con este esquema genera las condiciones para que una organización
se considere leal al Derecho y obtenga múltiples beneficios, que van desde el
mayor rendimiento en sus procesos internos, incremento de clientes e ingresos,
ampliación del esquema de alianzas empresariales nacionales e internacionales,
hasta el prestigio de la firma. Para ello, será necesario que la persona
jurídica se ajuste al marco legal vigente en México.
Basham,
Ringe y Correa es una exclusiva firma miembro en México de Lex Mundi, la red
líder mundial de bufetes de abogados independientes con amplia experiencia en
más de 100 países en todo el mundo.