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Aplican la industria en pro de la ecología y la salud

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La empresa Evirofit, dedicada a manufacturar estufas ecológicas en México, como parte de su programa de responsabilidad social impulsados por el Gobierno del Estado, realizó la donación de 30 estufas en el municipio de Jalpan de Serra, así lo dio a conocer en entrevista, Emilio Rivero, director general de Envirofit México.

 

En México mueren 15 personas al año por causas directas producidas por efecto de cocinar a fuego abierto, la mayoría mujeres y niños de bajos recursos, algo comparado al estar expuesto a 400 cigarrillos por hora. La empresa estima que en Querétaro existen entre  70 y 100 mil familias que usan un fogón de leña. Tan solo en los municipios de El Marqués, Querétaro, San Juan del Río, Amealco de Bonfil y Cadereyta, se concentran alrededor de 150 mil personas afectadas por esta situación.

 

Ante ello Evirofit diseñó estufas ecológicas construida con tecnología patentada por ellos. “En el momento que empresas y organizaciones como la mía dicen: si quieres resolver este problema tienes que dejar la visión de que vamos agarrar lodo y arena, y vamos a construir una estufa, lo que tenemos que saber es que es a través de alta tecnología y una solución industrial”, dijo Emilio Rivero.

 

El corazón de esta estufa es una cámara de cocción que está elaborada con un metal que es el único que no se consigue todavía en México, una aleación de tres metales que lo hacen muy eficiente a resistir los choques térmicos y que no se va quebrar aunque sea expuesto a grandes temperaturas con otro metal.

 

Gracias a esta cámara es que se elimina la parte de la exposición, beneficiando también al medioambiente. “Entonces no solo estamos quitando la parte de exposición a CO2 y hollín, sino que la cámara de cocción gracias a una respuesta industrial es tan eficiente que reduces el consumo de leña para crear la misma energía o el mismo calor en un 80%”, comentó.

 

Este proyecto no solo ha ayudado a personas en México, sino que ya ha transcendido fronteras, por ejemplo, Honduras donde fue posible desplegar cerca de 350,000 estufas.

 

Entre los planes para el futuro de esta compañía están el trasladarse a Querétaro debido a su cercanía con la Ciudad de México, San Luis Potosí y Guanajuato, y por supuesto el seguir siendo una empresa con un fin social.

 

“En México todavía estamos en pañales en cuanto a empresas socialmente responsables, de emprendimiento social. Creo que soy de los pocos en que mi modelo está diseñado en ayudar a la gente”, concluyó.


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