La incorporación de herramientas de inteligencia artificial (IA), tecnologías e interconectividad dentro de los procesos de fabricación de lavadoras, refrigeradores, aspiradoras y otros electrodomésticos en el mundo representa una ventaja competitiva para la industria, que a través de la innovación puede ofrecer a los consumidores múltiples ahorros en servicios, optimización de recursos y personalización.
Actualmente, México cuenta con 345 unidades económicas relacionadas a la manufactura de electrodomésticos, lo que representa más de 413,771 empleos directos.
El adaptarse a procesos digitales, automatizados y con IA, forma parte de una fase de exploración, de acuerdo con Daniel Córdova, presidente del Clúster de Electrodomésticos del Estado de Nuevo León (Clelac) y director de operaciones de Trane Technologies, que podría reflejarse en ganancias para la industria de hasta 130,000 millones de dólares a nivel global para el 2030.
Esta cantidad representaría un incremento de más de 370% con respecto a los niveles actuales. “La tendencia en la generación de electrodomésticos es hacia aparatos cada vez más inteligentes, que optimicen el tiempo del usuario; a nivel global, se estima que la industria genere 530,000 millones dólares, de los cuales 35,000 millones son de aparatos inteligentes, pero para siete años la cifra podría llegar a más de 130,000 millones”.
Nearshoring México
La clave para crecer y adaptarse en este sentido es aprovechar el nearshoring, ya que, con la relocalización de las empresas en México, marcas mundiales han encontrado en este país mano de obra calificada, conexiones directas a Estados Unidos y facilidades de exportación para Asia y Europa.
Entre los ejemplos de aparatos inteligentes, Córdova habló sobre sistemas operativos de lavadoras que puedan conectarse al celular y que desde ahí el usuario programe los ciclos y duración, lo mismo para secadoras.
También, refrigeradores con pantallas, electrodomésticos en general que atiendan y reciban órdenes por voz. “El futuro de un electrodoméstico va hacia brindar libertad, confort, seguridad y facilidades al usuario, que la persona pueda controlar el aparato cuando esté fuera de casa, programarlo para que al llegar todo esté listo, México va ganando terreno gracias a las compañías internacionales que ya realizan aquí sus procesos de manufactura y esperemos que sigan llegando con el nearshoring”.
La industria de electrodomésticos tiene varias áreas de oportunidad para adaptarse a nuevas herramientas tecnológicas y digitales, como el trabajar de manera coordinada con centros educativos para promover la formación de nuevos profesionistas especializados. “Se han adaptado herramientas inteligentes para hacer más eficaces y autónomos los procesos, como robots de inspección y el internet de las cosas, pero la creación de ingenieros, profesionistas especializados, es indispensable”, agregó el presidente de Clelac.
El crecimiento de la industria
En México, el crecimiento de la industria de electrodomésticos es positivo, con niveles de 4.6% para el 2030, Nuevo León, Estado de México, Guanajuato, Baja California Norte, Ciudad de México, Puebla, Jalisco y Chihuahua son algunos de los estados donde el gremio tiene mayor presencia.
Mientras que, a nivel mundial, la manufactura mexicana ocupa el primer lugar de exportación de refrigeradores con congelador, el segundo en lavadoras de 10 kilos o menos, el tercero en refrigeradores con compresión, estufas de gas, aires acondicionados y calentadores eléctricos, además de un cuarto en aspiradoras.
“Hay que tomar el reto para desarrollar electrodomésticos enfocados a las nuevas tendencias, la oportunidad está ahí; en México tenemos existen todas las herramientas para sobresalir, desde la mano de obra calificada, la ubicación, corredores industriales, con una gran creatividad”.
Otras de las ventajas competitivas que el Clúster indica para la industria al utilizar herramientas con IA, son los procesos de simulación para elegir los mejores materiales y ensamblarlos de manera precisa, así como la automatización con base en datos que permite enfocar los esfuerzos del capital humano hacia tareas más complejas, la gestión de inventarios con planificaciones adecuadas, a través de información sobre los tiempos de entrega y costos de transporte.
También en mantenimiento, al predecir y vigilar el control de calidad en las líneas de producción para garantizar al cliente que la inversión de su electrodoméstico será a largo plazo.
