La producción de alimentos, así como la fabricación y el consumo de bienes para el hogar y la industria son ejemplos de actividades cotidianas que producen una gran variedad de residuos. Dependiendo de su composición, tasa de generación y manejo, pueden tener efectos muy diversos en la población y en el ambiente, llegando, en algunos casos, a ser altamente peligrosos, sobre todo cuando involucran compuestos tóxicos que se manejan de manera inadecuada.
Además de que el manejo inadecuado de residuos genera una fuerte presión sobre el ambiente, su gran volumen también se ve ligado a la discusión sobre la fabricación y el consumo sostenible, específicamente cuando se aborda el uso de los recursos naturales y energéticos necesarios para producir todos los materiales y bienes que terminarán por convertirse en residuos. De esta manera, la gestión integral de los residuos, además de procurar disminuir su generación y conseguir su adecuada disposición final, también puede dar como resultado colateral la reducción, tanto de la extracción de recursos (evitando su agotamiento), como de la energía y el agua que se utilizan para producirlos, así como la disminución de la emisión de gases de efecto invernadero.
Javier Calderón, vicepresidente del sector industrial de economía verde en la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra), comentó que actualmente México tiene un gran potencial de crecimiento industrial, pues toda la infraestructura le ha generado oportunidad de desarrollo económico. Esto se ha visto en los megaproyectos en proceso de los sectores público y privado, como en el sector automotriz en la región norte y el Bajío. Los sectores industriales han tenido crecimiento, por ende, generan una mayor necesidad de tener infraestructura para poder disponer de los residuos que la producción emite. El crecimiento poblacional también tendrá nuevas necesidades para el manejo adecuado de los residuos.
“Se necesita una concordancia y trabajo en conjunto entre el sector público, privado y sociedad. El sector industrial está comprometido, y Canacintra está también comprometida, fue la primera cámara industrial que creó su sector de economía verde, donde aglomeró a empresas dedicadas al manejo y responsabilidad ambiental. El reto es importante y la participación también”.
En el área de economía verde de la Canacintra, trabajan de manera transversal con los 16 sectores que conforman la cámara, y desde su óptica ambientalista inciden en el tema de responsabilidad ambiental.
“La industria manufacturera tiene que crear competitividad, mejora, crecimiento, sin perder de vista nunca la responsabilidad ambiental. La industria manufacturera está cada vez más comprometida con el cuidado del medio ambiente, es un eje rector de la economía en México y está comprometido en cumplir con la normatividad ambiental. México es un país que cuenta con la normatividad ambiental más estricta del mundo, el problema es la aplicación de la misma y el compromiso de la industria manufacturera es apegarse a los protocolos internacionales firmados, apegarse a la normatividad ambiental y cumplir con ello para generar, de manera correcta, su competitividad y crecimiento”, finalizó Calderón.
Por su parte, Francisco Galván, presidente de DS Latinoamericana, resaltó que las industrias en el país hacen un gran esfuerzo para darle un adecuado manejo a sus residuos, tanto especiales como residuos peligrosos, pero México requiere una transformación en el tema de infraestructura para dar el mejor tratamiento a los residuos del sector manufacturero.
“Es indispensable una alianza entre el gobierno federal con el sector privado y académico para generar políticas públicas e incentivos económicos que permitan pasar a una fase de creación de infraestructura rumbo a la circularidad”, enfatizó.
En manufactura se pueden encontrar sustancias químicas peligrosas, desechos peligrosos o especiales, desde la fabricación de artesanías hasta la elaboración de alta tecnología.
“En el tema de industria, encontramos que el cartón y plástico, que son los insumos o los residuos que salen de los procesos de producción, son los de mayor cantidad. Una característica del sector manufacturero es que sus residuos generados dentro del proceso son limpios. Entran al mercado de valorización más fácil que los residuos urbanos, muchos de ellos se convierten en materia prima para otros sectores. Hay que ir generando todo el esquema de transformación y tecnología para darle mayor manejo a estos materiales. México se sigue transformando día a día, sigue siendo estratégico a nivel global y definitivamente el tema de invertir en infraestructura y mejora en el manejo de residuos es un tema que debe estar en la agenda pública nacional”, agregó Galván.
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