El sector automotriz en Querétaro prevé la creación de al menos 2,500 empleos para el segundo semestre del año, derivado del crecimiento de las empresas de autopartes en la región.
El presidente del clúster automotriz de Querétaro, Renato Villaseñor Mendoza, señaló que si bien la industria que representa ya activó “el freno” al ritmo de crecimiento que venía registrando, aún hay condiciones para ofertar nuevas plazas de trabajo.
“Definitivamente que la rebanada gruesa de empleos es para el sector operativo dentro del spot de empleos generados. Uno de los rubros que preguntamos en nuestras encuestas, a cada una de las empresas, es ¿cuántas personas van a contratar como creación de nuevos empleos y cuántas personas piensan contratar en función de la rotación? La rotación es una rebanada más grande, pero en creación de nuevos empleos tenemos un número preliminar de alrededor de 2,500”, sostuvo.
Si bien el ritmo de crecimiento se ha desacelerado respecto a años anteriores, como en 2017, cuando registraron un crecimiento anual de 8.6%, el sector automotriz aún mantiene alzas atractivas en sus ventas. Para el cierre de este año, previó Villaseñor Mendoza, esperan un crecimiento de 5 por ciento.
Por otro lado, el titular de la Secretaría de Desarrollo Sustentable, Marco del Prete Tercero, destacó que mientras que en julio a nivel nacional se perdieron 14 mil empleos, el Estado generó 2,999 plazas de trabajo; dando un total de 30,640 empleos creados en el primer semestre de este año en la entidad.
MEJORES PRÁCTICAS
Con el objetivo de contrarrestar la rotación de personal y generar ambientes laborales más productivos se llevó a cabo el Simposio de Recursos Humanos del clúster automotriz de Querétaro en las instalaciones de la Universidad Politécnica de Querétaro.
Renato Villaseñor destacó que una de las líneas que buscan atender este año es la vinculación entre la academia y la industria, a fin de tener personal más perfilado.
“Este tipo de simposio es para generar de una manera más rápida a los estudiantes, que cuando se gradúan se puedan integrar de una manera más fácil a la fase productiva, que logremos reducir ese gap, que ahora es de 1 a 2 años. Les falta un poquito el lenguaje de la industria, familiarizarse con lo demandante que es y es lo que estamos haciendo para reducir ese gap”, explicó.
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