Explicado de una manera
básica, los autos híbridos obtienen un excelente kilometraje de combustible por
una simple razón: no utilizan el motor de gasolina todo el tiempo. Pero, en
realidad, el motivo es más complejo que eso, y tiene similitudes con la
tecnología que también permite ahorrar mucho dinero en el enfriamiento de un
centro de datos. Nos referimos a los compresores de velocidad variable (VSD)
que ayudan a adaptar la capacidad de enfriamiento a los requerimientos
necesarios.
¿Cómo funcionan los autos
híbridos?
Este tipo de autos tiene un
motor eléctrico alimentado por una batería que impulsa el auto la mayoría de
las veces, lo que no sólo ahorra combustible, sino que permite un mayor
aprovechamiento de la gasolina junto al diseño eficiente del motor. Reducir la
demanda en el motor significa que no es necesario que el motor sea tan grande
como en un auto tradicional, permitiendo que opere de forma más eficiente.
Otra manera en que los autos
híbridos ahorran combustible es con el frenado regenerativo. Los coches
convencionales dependen enteramente de los frenos de fricción para disminuir la
velocidad, disipando la energía cinética del vehículo en forma de calor. Ahora,
el frenado regenerativo permite que parte de esa energía sea capturada,
transformada en electricidad y almacenada en las baterías. Esta electricidad
almacenada se puede utilizar más adelante para hacer trabajar el motor y
acelerar el vehículo.
Además, algunos híbridos
ofrecen lo que conocemos como accionamiento eléctrico, donde el vehículo opera
totalmente en el torque del motor eléctrico y en bajas velocidades, o para un
alcance limitado. El punto principal es que el auto utiliza el motor eléctrico
de manera más eficiente, tanto como sea posible, hasta que realmente necesite
el motor de gasolina. Esto es muy similar a la forma en que el compresor de
velocidad variable (VSD) opera junto a un sistema de enfriamiento para el
ahorro en un centro de datos.
Tecnología eficiente para
centros de datos
De la misma manera que el
frenado regenerativo utiliza la fricción para alimentar el auto, los
economizadores utilizan el aire externo para enfriar un centro de datos. Cuando
combinamos esto con un enfoque que utiliza temperaturas más altas en los
centros de datos y nuevos sistemas de enfriamiento adiabático, los compresores
con inversor hacen posible un concepto de enfriamiento “recortado”, donde se
reduce la cantidad de enfriamiento suministrada por los compresores
tradicionales.
El enfoque de enfriamiento
“recortado” dimensiona con mayor precisión el enfriamiento mecánico para
encargarse sólo del calor del centro de datos que no es disipado por las
unidades economizadoras. Es muy parecido al modo en que el motor de gasolina en
un auto híbrido sólo entra en acción cuando los requisitos de potencia exceden
lo que el motor eléctrico puede suministrar.
Considera un centro de datos
que requiere 1MW de capacidad de enfriamiento. Con eso, en un día típico, el
sistema economizador se ocupa de 800kW. Cuando la temperatura es más fría, es
probable que el economizador manipule 900kW de refrigeración o en días
calientes sólo 700kW. Con un enfoque de enfriamiento “recortado”, el compresor
variable compensaría según lo necesario, así que el compresor estaría manejando
solamente la capacidad de enfriamiento que necesita, tal como el auto híbrido
utiliza el motor de gasolina solamente cuando es necesario.
Ahorros de hasta un 40%
El impacto de este enfoque
puede ser drástico, con ahorros de hasta un 40% en los costos de enfriamiento.
Pero esto va más allá del simple ahorro en facturas de electricidad. Debido a
que el centro de datos no necesitará tanta capacidad de enfriamiento del
compresor tradicional, puede usar un compresor más pequeño (al igual que el
auto híbrido utiliza un motor más pequeño), lo que reduce los costos de capital
tanto en la perspectiva por unidad, como en la de la infraestructura eléctrica.
Además, las necesidades de infraestructura eléctrica también se reducen, ya que
el compresor no va a necesitar tanta energía, de ese modo nuevamente se reducen
los costos de capital.
En el caso de un centro de
datos, se podría aumentar la capacidad de TI utilizando el compresor existente
y la infraestructura eléctrica, permitiendo así un crecimiento mayor de lo
anticipado. Para una empresa, eso significa menores gastos de capital, mientras
que, para un proveedor de colocación, puede significar apoyar a clientes nuevos
en el mismo espacio de TI.
Poder
aprovechar al máximo los VSD’s así como el enfoque de enfriamiento “recortado”
requiere la implementación de un sistema de enfriamiento que permita utilizar
el modo economizador tanto como sea posible. Es ahí donde los nuevos sistemas
de enfriamiento adiabático entran en juego.