El auge de los vehículos eléctricos o de nueva energía está impulsado por preocupaciones medioambientales y la necesidad de reducir las emisiones de carbono.
Ante esta revolución en la movilidad eléctrica, existe un fuerte compromiso de fabricantes y proveedores por garantizar mediante sus aplicaciones y tecnología, precisión en los componentes de este tipo de vehículos, siendo las baterías elementos clave en la estructura y en la seguridad.
Para que esta revolución sea un éxito, la calidad en la fabricación de las baterías de los autos eléctricos, es esencial. Las baterías desempeñan un papel importante en el rendimiento y la longevidad de estos, por lo que la calidad se convierte en un proceso complejo, en que se aplican diferentes técnicas de medición para inspeccionar las características de la batería, como el material, el electrodo, la celda, el módulo y la bandeja de la batería.
Desde vehículos eléctricos de dos ruedas, camiones o maquinaria de construcción, las baterías se personalizan para cada aplicación.
Un análisis reciente indicó que los vehículos eléctricos de batería representaron el 14.3% de las nuevas matriculaciones de automóviles en 14 grandes mercados, representando un crecimiento de 10% en comparación de 2020. A nivel global, se prevé que la venta de estos vehículos alcance más de 800,000 millones de dólares para 2027.
Valeria Cano, key Account Manager & New Energy Vehicles Specialist para ZEISS Industrial Quality Solutions, dijo que la electromovilidad es una realidad y una estrategia necesaria para cuidar el medio ambiente.
“En México aunque el camino aún tiene un buen tramo por recorrer, hoy representa una gran oportunidad gracias al nearshoring, pues empresas del sector de países como Suiza, España, Alemania y Estados Unidos, están volteando a ver a México para relocalizar sus plantas. Por ello, cumplir rigurosamente con los estándares de calidad de las baterías es esencial para ganar la confianza y satisfacción de proveedores y usuarios, así como un paso crucial para impulsar la adopción de esta tecnología”.
La calidad ligada a los procesos de fabricación
Para ZEISS Industrial Quality Solutions es necesario no sólo utilizar materiales de primera calidad, sino también técnicas de producción precisas, en que el involucramiento de la tecnología garantice su calidad.
Para asegurar que las baterías son fabricadas bajo los más altos estándares, se utilizan diferentes técnicas de medición para inspeccionar las características de la batería. A través de la microscopía electrónica por ejemplo, las propiedades eléctricas de las baterías se pueden registrar y mejorar continuamente.
“La microscopía industrial se utiliza para analizar los materiales de las baterías, la estructura de las celdas y las posibles impurezas durante la producción. De igual forma hay sistemas de rayos X y tomografías computarizadas que permiten analizar de forma no destructiva las celdas y módulos. La tecnología actual permite garantizar la calidad a lo largo de los procesos de manufactura, atendiendo los principales desafíos en la producción de baterías”.
Pruebas de calidad, un deber en la industria
Antes de que la batería sea aceptada para su uso en un vehículo, se somete a rigurosas pruebas de calidad para garantizar su rendimiento y seguridad. Esto puede incluir pruebas de resistencia, ciclaje y seguridad en casos extremos. Lo que requiere una variedad extensa de herramientas de imagen, análisis y metrología para analizar las baterías y garantizar la calidad en su fabricación.
Las soluciones para la electromovilidad abarcan desde microscopía óptica, electrónica, de rayos X y sistemas de tomografía computarizada, junto con máquinas de medición por coordenadas, para evaluar y relacionar aspectos estructurales, composicionales, eléctricos y dimensionales en las escalas pertinentes.
Por lo tanto, se necesita una amplia gama de herramientas de imágenes, análisis y metrología para permitir la investigación de baterías y la gestión de la calidad en la producción. De este modo, ZEISS recomienda adoptar las nuevas tecnologías en metrología que permitan la automatización en la medición y control de calidad de productos en proceso y terminados dentro de las instalaciones de manufactura.
“Las baterías de vehículos eléctricos son como el corazón de la movilidad del futuro. Su fabricación precisa y su mejora continua son cruciales para acelerar la adopción de vehículos eléctricos y contribuir a un mundo más limpio y sostenible”, concluyó.
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