Con una Inversión Extranjera Directa IED que supera los 7,801 millones de dólares en las últimas dos décadas, México se ha posicionado como un destino clave en la manufactura de componentes electrónicos.
Estados Unidos, Corea del Sur y Taiwán, son los países que lideran el flujo de inversión, mientras que Baja California, Tamaulipas y Jalisco, han sido históricamente los centros de atención para el sector industrial, de acuerdo a la Secretaría de Economía.
Sin embargo, la cadena de manufactura se ha expandido hacia otras regiones del país como Ciudad de México, Chihuahua y San Luis Potosí, evidenciando un cambio en las dinámicas industriales.
Entre enero y septiembre del 2023 la IED de este sector alcanzó los 206 millones de dólares.
Las ciudades industriales de México, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), emergen como motores en la expansión de la industria de componentes electrónicos en el país. En la lista aparece el crecimiento de la última década en Tijuana, Baja California; Ciudad Juárez, Chihuahua; Nogales, Sonora; Mexicali y Tecate en Baja California.
Además de otras localidades como Nogales, Hermosillo, Agua Prieta y Magdalena en Sonora; Zapopan y Tlaquepaque en Jalisco; Reynosa y Matamoros en Tamaulipas; Apodaca, Guadalupe y Monterrey en Nuevo León; y diversas ciudades en Querétaro, Ciudad de México, Estado de México y Coahuila.
En el Directorio Estadístico Nacional de Unidades Económicas (DENUE) del 2022, se contabilizaron 487 empresas relacionadas a la fabricación de componentes electrónicos, de las cuales 239 contribuyen con la generación de más de 100 empleos en lo particular.
Mayor demanda
Este crecimiento constante no solo se refleja en las estadísticas gubernamentales, sino también en el terreno operativo de empresas extranjeras que han invertido en México, como Borgwarner.
La compañía con presencia en Jalisco, Guanajuato, Chihuahua, Tamaulipas y San Luis Potosí, proyecta un incremento de 40% en las ventas de sus productos de manufactura electrónica para el 2024, lo que podría representar un impacto de hasta 2.8 mil millones de dólares en su mercado global.
La empresa de origen estadounidense fabrica una amplia gama de artículos, algunos utilizados en la industria automotriz con enfoque al sector eléctrico.
Más líneas de producción
Otra de las compañías de la industria de componentes electrónicos en México es LG Electronics, que en enero de este 2024 anunció la apertura de una nueva línea de producción de compresores scroll en su fábrica ubicada en Monterrey.
La decisión de la compañía surgió en un momento en el que fabricantes de sistemas de calefacción, ventilación y aire condicionados en Estados Unidos, enfrentan diversos desafíos.
A través de un comunicado la empresa detalló que los compresores que son fabricados en esta planta se comercializan principalmente en el mercado de América del Norte, en cumplimiento a los estándares de cuidado al medio ambiental, al utilizar refrigerantes de bajo potencial de calentamiento global y con tecnología de eficiencia energética.
Nuevas inversiones
Son diversos los proyectos de inversión extranjera que México ha logrado atraer de la industria electrónica, entre los más recientes está la compañía Time Interconnect Technology Limited, con una inversión de 40 millones de dólares en una nueva planta en Reynosa, Tamaulipas para producir cables de cobre y fibra óptica para los sectores de telecomunicaciones, centros de datos, equipos industriales, médicos y automotrices.
La empresa ELRAD Electronics es otro ejemplo con una inversión superior a 12 millones de dólares en Guanajuato para la fabricación de ensambles de placas de circuito impreso, utilizados en las industrias automotrices, electrodomésticos, línea blanca y otras.
Otra de las empresas que invirtió en los últimos meses en el país es IKOR, con un monto de hasta 2,000 millones de pesos para el diseño y fabricación de circuitos electrónicos en Tlajomulco, Jalisco.
Incentivos por nearshoring
La industria de artículos electrónicos figura entre los sectores más beneficiados por el plan de atracción de nearshoring, anunciado por el gobierno federal en el último trimestre del 2023, con el objetivo de incentivar la inversión extranjera en México.
Este plan ofrece un rango de incentivos fiscales significativos que van desde 56% hasta 86% para diversas actividades relacionadas con el diseño, fabricación, ensamble, pruebas, empaquetado e investigación del sector.
Para el caso de los semiconductores, se estableció un incentivo de 56%, mientras que, para lo referente a tarjetas simples o cargadas, circuitos, capacitores, condensadores, resistores, conectores y semiconductores, así como para procesos asociados con bobinas, transformadores, módems para computadoras, teléfonos y arneses, el incentivo se fijó en 76 por ciento.
El mayor incentivo de 86%, se destinó a la fabricación de equipo eléctrico y electrónico relacionado con una amplia gama de sistemas, desde dirección y suspensión, hasta frenos y transmisión, así como para accesorios interiores y piezas metálicas troqueladas para una variedad de vehículos, incluyendo automóviles, camionetas, camiones, trenes, barcos y aeronaves.
Este mismo porcentaje se aplicó a la manufactura, ensamble o transformación de baterías de cualquier tipo de vehículo eléctrico.
México se encuentra en una posición privilegiada para capitalizar las oportunidades que ofrece el mercado global de la electrónica. La producción de esta industria representa una figura de atracción de inversiones, desarrollo de nueva infraestructura y generación de empleos, por ello los datos económicos apuntan hacia un continuo avance para este 2024 y los años posteriores.
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