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La importancia de la planeación en la cadena de suministro automotriz

Israel Molina.
Marzo 01, 2023

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La escasez global de microchips impacta severamente al mercado automotriz y no hay una rápida resolución a la vista. Esta disrupción de la cadena de suministro llama la atención de líderes y expertos en la industria de todo el mundo, pero de todas maneras el problema persiste. 

Resumiendo, no hay suficientes chips para satisfacer la demanda. Algunas tácticas de corto plazo pueden ayudar a disminuir las pérdidas, pero se requieren cambios a largo plazo en estrategia y planeamiento de la cadena de suministro. Afortunadamente, contar con tecnología avanzada puede mitigar considerablemente el impacto de las disrupciones en la cadena de suministro en el futuro, así lo indicó José Rivero, country manager de Infor México.

 

¿Cómo afecta la escasez actual de chips?

Los autos se han convertido literalmente en smartphones sobre ruedas, y los semiconductores se han tornado cada vez más críticos para una cantidad de aplicaciones, desde sensores de presión de combustible, velocímetros digitales, herramientas con inteligencia artificial que ayudan en el estacionamiento, buscar la estación de servicio más cercana o para alertar que hace falta un cambio de aceite. Sin estos dispositivos, la recuperación de la industria automotriz postpandemia está demorada y las empresas se ven imposibilitadas de cumplir con los pedidos. Según algunas estimaciones, el impacto en los volúmenes globales de producción será de aproximadamente siete a ocho millones de unidades, y McKinsey informó que los principales productos de vehículos han anunciado considerables bajas en su producción debido a la escasez de chips, disminuyendo la facturación esperada en varios miles de millones de dólares.

 

¿Qué pasó con todos los chips?

Rivero comentó que el problema comenzó en los primeros meses de la pandemia de Covid-19, cuando la venta de autos cayó casi un 80% en Europa, 70% en China y casi un 50% en los Estados Unidos. Esto también se reflejó en América Latina. La falta de demanda de autos nuevos causó que las fábricas cerraran, los trabajadores fueran a sus casas y los pedidos de repuestos y componentes, como los semiconductores, se cancelaran. 

“Esto fue no ver a largo plazo. Tech Republic reportó que cuando las OEM automotrices cerraron, cancelando pedidos, dejaron a los proveedores de chips con capacidad en exceso en el inventario. Al mismo tiempo, algunos sectores necesitaron más semiconductores para cumplir con las demandas de consumo en las casas y de trabajadores remotos. Las ventas crecientes en PC, tabletas y electrónica para estudiantes y trabajadores que instalaban estaciones de trabajo en sus casas y las personas consumieron mayor cantidad de streaming. Esto ayudó a usar el stock existente de chips y esto sigue vigente”.

Cuando las fábricas cierran, se pierden puestos de trabajo que dañan la economía familiar. Industry Week subrayó las ramificaciones políticas. “La escasez de chips que afecta a la manufactura tiene un impacto masivo en la economía de los EE.UU., disminuyendo la producción de automóviles y aumentando los precios”. La Casa Blanca se ha reunido con ejecutivos del sector de semiconductores y los líderes en Europa intentan resolver el tema actual de los chips y buscar soluciones a largo plazo.

Algunas OEM están haciendo cosas por su cuenta, intentando desarrollar sus propios microprocesadores y hasta su propio software. Esto puede significar un mayor control; muchos expertos lo consideran económicamente no práctico, ya que los chips automotrices son de bajo valor, son ítems de commodities. Invertir en desarrollarlos es una actividad de alto costo que tomaría años en ser rentable.

Una excepción es Tesla. Ha diseñado un microchip para su sistema Full Self-Drive, produciendo todo hasta el propio chip. En el segundo trimestre del 2022, el productor de autos tuvo un número récord de vehículos llegando a los 1,000 millones de dólares en ganancia neta por primera vez.

 

¿Cómo responder a la escasez de chips a largo plazo?

José Rivero, country manager de Infor México, recalcó que la tecnología puede ayudar a superar retos complejos y enumeró cuatro aplicaciones básicas: 

 

Visibilidad de los Datos. “Las empresas de manufactura pueden encontrar ayuda en la tecnología para aprovechar los datos e interpretar los indicadores económicos. El análisis de datos es una armadura importante en esta batalla, pero debe aplicarse en forma estratégica, proyectando los probables resultados, como también el entendimiento de las influencias históricas”.

 

Visibilidad de la cadena de suministro extendida. “Dicha visibilidad debe extenderse más allá de los proveedores de primer nivel, llegando a toda la red de la cadena. Aunque utilizar opciones secundarias, como pequeños barcos de carga, agrega algunas preocupaciones de confiabilidad, complicando temas en otro frente. Esto debe ser un esfuerzo a largo plazo con prueba y error. Llegar al máximo detalle es la única forma de obtener una vista real de los riesgos y cuellos de botellas potenciales”.

 

Mantenimiento de la flexibilidad de la cadena de suministro y mitigación del riesgo. “No alcanza con simplemente observar los potenciales problemas. Las empresas deben también poder accionar, reasignar las órdenes o reorientar las rutas de traslado, según sea necesario para mantener el inventario en movimiento, generando rutas de la ubicación más adecuada. Las plataformas que vinculan a los socios comerciales vía procesos comunes y datos compartidos pueden brindar funcionalidades optimizadas, disminuyendo considerablemente el riesgo”.

 

Innovación colaborativa. “Los cambios en las especificaciones del diseño del producto pueden ayudar a facilitar algunas brechas del inventario. La búsqueda de chips para el consumidor con mayor capacidad (mayores costos) puede transformar a las cuentas automotrices de menor prioridad en aquellas que reciben mayor atención de los productores de semiconductores”.


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