La participación de las mujeres en el sector automotriz de México aún tiene grandes espacios de mejora, tanto en actividades de fabricación como en la comercialización. De acuerdo con el Censo Económico “Los hombres y las mujeres en las actividades económicas”, realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), los hombres representaban 63.5% del personal ocupado que hubo en 2019 dentro del subsector “Fabricación de equipo de transporte”, y las mujeres, 36.6 por ciento.
En lo que respecta al “Comercio al por menor de vehículos de motor, refacciones, combustibles y lubricantes”, el mismo censo reveló que 72.3% de las personas que trabajan en este subsector eran hombres y 27.7%, mujeres.
A nivel global, la situación no es muy distinta. El estudio Women at the Wheel 2020, de Deloitte, señaló que únicamente 24% de los empleados que laboran en la manufactura de vehículos de motor y de autopartes es del género femenino, mientras que, en la comercialización de vehículos, las mujeres solo representan 18% de la plantilla total.
Pero la baja participación de este sector no es el único desafío. El estudio señala, además, que cerca de la mitad de las profesionales encuestadas (45%) señalaron que, si estuvieran por comenzar su carrera, optarían por otra industria distinta a la automotriz. Las principales razones por las cuales les resulta poco atractivo desarrollar su talento en ese ramo son:
Falta de diversidad, equidad e inclusión (64%).
Falta de balance entre su vida y el trabajo (53%).
Horario poco flexible (43%).
Actualmente, ha cambiado el panorama en la industria automotriz, cada vez hay más mujeres en puestos directivos de compañías globales, que llevan el negocio de manera exitosa y con crecimiento. Asimismo, ocupan puestos directivos en cámaras y asociaciones que agrupan a un gran número de empresas del sector.
Elisa Crespo, una historia de éxito
Elisa Crespo Ferrer, es egresada de la Universidad Nacional Autónoma de México con dos especialidades en Mercadotecnia y Comunicación, así como una maestría en Alta Dirección y Negocios por parte del IPADE.
Gran parte de su vida profesional la ha desempeñado en el ámbito de la movilidad en México. Sus primeros pasos en la industria automotriz fueron al ingresar a las filas de cúpulas empresariales, donde se convenció de la fortaleza del país en el tema.
“Me desempeñé en distintas cúpulas empresariales como asesora de líderes de opinión y funcionarios de la Secretaría de Economía. En el 2005 había una grande necesidad de entender a la industria automotriz y visibilizarla, por lo que decidí escribir dos libros: “México y su industria automotriz”, después, en el 2007, “La industria automotriz en el Estado de México”, ahí es donde comienza mi aprendizaje de una de las regiones más importantes para el país”.
Posteriormente, Elisa Crespo se desempeñó como directora de comunicación y relaciones insitucionales por parte de la Asociación Mexicana de Industria Automotriz (AMIA), donde tuvo contacto con distintas iniciativas de clusterización, ahí se convirtió en la coordinadora nacional de clústers. “Fue la gran oportunidad para visualizarme en una región, tenía que saltar, y a lado del Ing. Mauricio Merikanskas, decidimos impulsar la inicitiva de la creación del Clúster Automotriz del Estado de México que comenzó con cinco empresas y al día de hoy cuenta con más de 110 empresas automotrices. Ya 10 años de esta labor con el objetivo de volver a posicionar en el radar a una de las regiones que históricamente ha sido importante y que hoy pasa por un momento que vale la pena destacar, porque es el primer estado donde se produce el vehículo eléctrico, lo que habla de que el estado siempre ha tenido un gran desarrollo tecnológico y empresas muy maduras”.
El paso de Elisa Crespo por la industria automotriz no ha sido sencillo. “Ha sido retador y complejo en un sector donde prácticamente más del 80% de los trabajadores son hombres. Pero ha habido una gran ventaja al identificar estos grandes talentos que tiene el país, y estos grandes talentos han sido hombres visionarios. Destaqué a Mauricio Merikanskas, pero también hay otros que me han permitido desempeñarme y desenvolverme en esta industria”.
El sector automotriz ha evolucionado
“El sector ha escalado de tal manera que ha volteado a ver las capacidades que tenemos como mujeres, y esas habilidades y aptitudes permiten generar equipos de trabajo, pues esta industria no trabaja de manera aislada, se tiene que saber hacer equipo, y las mujeres somos muy hábiles para poder desarrollarlos. También tenemos un nivel de toleracia muy desarrollado y una inteligencia emocional a prueba de todo, eso es lo que ha permitido que esta industria tenga la ventaja de que la tecnología sea nuestro gran aliado, lo que facilita el acceso a las mujeres. Todos estos movimientos nos han permitido romper el ‘techo de cristal’, entre mujeres somos solidarias y podemos trabajar. Existe gente en México muy talentosa y lo único que se necesita es una oportunidad para quien ya apostó por la industria automotriz.
Por último, Elisa Crespo, presidenta ejecutiva del Clautedoméx, les dice a las mujeres que “se preparen, muchas veces les dirán que no puden y muchas veces tú misma dudarás de tu capacidad, pero existe un momento de reflexión y es cuando más debes creer en ti, ese fue mi caso. Yo me he encontrado ingenieros sumamente talentosos y abiertos con la intención de impulsar a las mujeres y por eso estoy agradecida con mi consejo de administración. A todas las mujeres, niñas y adolecentes que están incursionando en las áreas de ciencias exactas: han tomado la mejor decición de sus vidas y estoy segura de que la industria automotriz les va a dar todo eso que aspiramos como personas”.
