A pesar de los desafíos impuestos por la pandemia, en 2020, la industria siderúrgica latinoamericana registró más de 1.2 millones de empleos directos e indirectos. La Asociación Latinoamericana del Acero (Alacero) trabaja para mantener la integridad de la cadena de valor del acero en la región, así como para fomentar condiciones de sana competencia en el mercado regional.
Alejandro Wagner, director ejecutivo de la organización, compartió que el mercado continúa su proceso de normalización en 2021: por un lado, la producción de acero laminado evoluciona favorablemente frente a la recuperación de la demanda; y por el otro, las importaciones siguen representando un riesgo para la producción y el desempeño de las empresas siderúrgicas.
“La cifra acumulada de producción de acero laminado hasta abril fue de 18.3 (Mt), un 17% superior al registrado en el mismo periodo de 2020 (15.6 Mt), y un 5.5% superior al de 2019”, dijo.
INDUSTRIA 4.0
De acuerdo con un estudio de Alacero referente al avance, uso y conocimiento de las tecnologías 4.0 en las plantas de la region, realizado en 2020, las principales tecnologías utilizadas por la industria siderúrgica en la región son computación en la nube, ciberseguridad e integración de sistemas; y las que se identificaron como mayores generadoras de valor a los negocios son big data, robótica, simuladores e integración de sistemas.
“Según el informe, las acciones llevadas a cabo por nuestros asociados para lograr una industria 4.0 sólida y sustentable incluyen la definición de planes estratégicos, creación de equipos específicos para evaluar tecnologías, dedicación de fondos específicos para inversión en nuevas tecnologías y alianzas con proveedores de estas y startups”.
PERSPECTIVAS DE CRECIMIENTO
Según Worldsteel, el consumo de acero laminado hasta marzo de 2021 creció 17% con respecto al mismo periodo de 2020, y 13% con respecto a 2019. El aumento se presentó, principalmente, en los sectores de construcción y manufactura de las tres principales economías latinoamericanas: México, Brasil y Argentina, que sumaron un total de 18.4 Mt en el primer trimestre. El sector de la construcción representa actualmente el 47.2% del acero consumido en la región, con lo que mantiene el mismo nivel en comparación con 2020.
“La expectativa es que la producción se mantendrá en una trayectoria positiva a medida que se consolide el consumo a nivel regional y el déficit comercial esté bajo control en la segunda mitad del año”, dijo Wagner.
El director general señaló que prevén el futuro de la industria con optimismo, ya que América Latina tendrá un aumento en el Producto Interno Bruto de 4.6% en 2021 y 3.1% en 2022, según el Fondo Monetario Internacional. No obstante, mencionó que el escenario global de incertidumbre prevalece.
Por otro lado, entre los principales desafíos de la industria se encuentra continuar con la reducción de emisiones, para lo cual se necesita, por ejemplo, acceso abundante de energías renovables a precios competitivos e inversiones públicas para desarrollar las tecnologías disruptivas en Latinoamérica.
“Las famosas tecnologías disruptivas reducirán considerablemente las emisiones, pero solamente tendrán mayor penetración en el mercado a partir de 2030. En los últimos 50 años se ha reducido 61% el consumo de energía por tonelada”, resaltó el director.
Asimismo, destacó que América Latina tiene un promedio de emisiones de CO2 por tonelada de acero crudo menor que el mundial y mucho menor que el de China. Por cada tonelada de acero producida en la región, se emite 1.6t de CO2, mientras que el promedio mundial es de 1.8t y el de China ronda 2.1t.
NUEVO LIDERAZGO PARA ALACERO
Alejandro Wagner asumió la dirección ejecutiva de la asociación en junio de 2021. El objetivo principal para su periodo de gestión, señaló, es potencializar el rol de Alacero como institución fundamental para los grandes desafíos que enfrenta la industria siderúrgica de América Latina y su cadena de valor en los próximos años.
Por ello, apoyarán a los colaboradores para que aumenten la productividad con sustentabilidad y seguridad. “Además de las inversiones, existen muchas aplicaciones en tecnología, como big data e inteligencia artificial, que ya se están utilizando para este fin en la industria”, dijo. Otros de los objetivos fundamentales son la generación de valor social, ambiental y económico.
Por ello, implementarán como una de sus primeras estrategias la comunicación y la adaptabilidad. “Nuestras líneas de trabajo van a abordar las principales problemáticas y desafíos de la industria; por ejemplo, agenda de sustentabilidad en temas de descarbonización, reciclaje, energías renovables y ciclo de vida del acero”.
Además, contarán con una agenda activa en temas de diversidad e inclusión, realizarán estudios y acciones de reindustrialización y reshoring, así como también defensa de la competitividad y fair trade. Adicionalmente, pondrán en marcha programas e iniciativas ligadas a la innovación y tecnologías para aplicaciones de acero, seguridad y medio ambiente, con un involucramiento del mundo emprendedor y de startups de la región.
Alacero está reconocida como Organismo Consultor Especial por las Naciones Unidas. Se encarga de resguardar, analizar y brindar estadísticas de la industria siderúrgica en cooperación con las Cámaras de cada país, e informa sobre las tendencias que pueden traer cambios en el consumo, la producción y la balanza comercial. Se fundó en 1959 y está integrada por más de 60 empresas productoras y afines cuya producción es cercana a 60 millones de toneladas anuales.
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