A partir del 2023, la industria deberá de cubrir un impuesto verde de 27 dólares por tonelada de CO2 emitida al ambiente, algo que si bien genera preocupación e inquietud entre las empresas, se trata de un instrumento económico a través del cual se pretenden disminuir las emisiones, informó Marco Antonio del Prete Tercero, titular de la Secretaría de Desarrollo Sustentable del estado de Querétaro (Sedesu).
Lo que se busca es que las empresas hagan un esfuerzo por reducir sus emisiones al medio ambiente y evalúen sus procesos y prácticas para transitar hacia la sustentabilidad.
“Hay que desmitificar el tema de la sustentabilidad como un tema de restricción”, y verlo como uno de promoción en línea con el cuidado al medio ambiente, dijo Del Prete Tercero.
Querétaro implementó una agenda ambiental basada en dos pilares: la economía circular y la descarbonización de la economía. En esta última, el estado busca disminuir las emisiones de CO2 al 2050 en 75%, de 12 millones de toneladas a entre 3 y 4 millones.
De acuerdo con el funcionario son seis las áreas de la economía que son susceptibles a la descarbonización: consumo de energía, transporte, industria, la generación de gases invernadero del comercio, residencia e instituciones, la agricultura y los bosques y usos de tierra. Siendo los primeros tres los más significativos.
En este sentido, a mediados de este año, la Sedesu firmó un convenio de colaboración con el Mercado Ambiental (México CO2), a través del cual se consolidó el desarrollo del sello de bajo carbono y de mecanismos de compensación de emisiones, mismos que entrarán en vigor el siguiente año y, a través de los cuales las empresas podrán reducir la base graval del impuesto ambiental que aplique.
“Son sellos que emite la secretaría en colaboración con el Comité Estatal de Acciones en Contra del Cambio Climático, que evaluará los proyectos que sean susceptibles para compensar las emisiones de carbono”, explicó.
El proceso para que las empresas se apeguen a este programa estará definido antes de concluir el año.
“Queremos demostrar que el cuidado al medio ambiente es un buen negocio, y que el estado a través de su cuidado puede seguir creciendo económicamente, atrayendo inversiones y desarrollando potencialidades y habilidades”, expresó.
De acuerdo con la guía de impuestos ecológicos en México en México, de pwc, en Querétaro se aplican tres impuestos verdes: Impuesto por la remediación ambiental en la extracción de materiales; el impuesto por emisión de gases a la atmósfera; y el impuesto por la disposición final de residuos de manejo especial y peligroso.
Además, Querétaro es el tercer estado con un mayor número de impuestos verdes, solamente detrás de Nuevo León y Zacatecas, ambos con cuatro gravámenes, cada uno.
Desde la academia
Por su parte, la academia hace lo propio desde la educación. Junto con la Sedesu, el rector de la Universidad Tecnológica de San Juan del Río (UTSJR), y el coordinador ejecutivo de la Comisión Estatal para la Planeación de la Educación Superior (COEPES), Fernando Ferrusca Ortiz, presentó las actividades del Tercer Congreso Internacional “Educación Ambiental para la Sustentabilidad: EAS 2022”.
El objetivo de este es impulsar una política pública de educación ambiental desde la iniciativa gubernamental estatal e instituciones de educación superior, para generar estrategias y mecanismos que permitan implementar proyectos orientados al desarrollo sustentable, mediante el aprovechamiento de los recursos naturales. El evento se realizará en el Querétaro Centro de Congresos del 17 al 18 de noviembre de este año.
