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La inteligencia emocional en tiempos de crisis

Redacción.
Mayo 01, 2020

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Por: Rosa Nelly Ramírez ¿Qué es lo primero que te viene a la mente cuando piensas en la palabra inteligencia? Seguramente respondiste que es “la habilidad para razonar, planificar, aprender, memorizar y analizar, en resumen es lo que nos ayuda a lograr un buen desarrollo en los campos académicos y técnicos”. ¡Correcto! La inteligencia es una capacidad mental que comprende los factores mencionados anteriormente, viene marcada por nuestra genética y puede medirse a través de pruebas de Coeficiente Intelectual dando como resultado, CI bajo, CI promedio o CI alto. En cambio, cuando hablamos de Inteligencia Emocional nos referimos a la capacidad de reconocer y manejar efectivamente nuestras emociones y responder en forma adecuada ante las emociones de los demás. “Es una habilidad APRENDIDA, para pensar constructivamente y actuar sabiamente”. La Inteligencia Emocional se aplica primero en nuestra persona y luego en todos los ámbitos de la vida como la educación, la escuela, la sociedad y la familia. Las personas podemos desarrollar la Inteligencia Emocional aprendiendo y practicando día a día las siguientes destrezas en forma intencional y consciente: 1.- Desarrollo Intrapersonal: Autoestima y Manejo del Estrés. 2.- Desarrollo Interpersonal: Asertividad, Manejo del Enojo y Manejo del Miedo. 3.- Autorregulación: Fuerza de Voluntad, Manejo del Tiempo, Compromiso Ético y Toma de Decisiones. 4. Liderazgo Inspirador: Empatía, Conciencia Social, Influencia Positiva y Orientación al Cambio. (Modelo Transformativo de Inteligencia Emocional, Darwin Nelson, PhD y Gary Low, Phd). Una persona con un alto desarrollo en las destrezas de la Inteligencia Emocional se conoce así mismo en forma precisa y se siente valioso, se comporta responsablemente, se relaciona en forma armoniosa con los demás y, en general, sabe reaccionar apropidadamente ante las demandas y presiones de la vida diaria, además de establecer y lograr metas significativas. Una persona que no ha desarrollado las destrezas de la Inteligencia Emocional se verá limitada en su vida, aún contando con grandes competencias y conocimientos técnicos, no podrá desarrollar su máximo potencial en los diferentes ámbitos porque se encontrará actuando en forma impulsiva ante las situaciones que se le presentan. Existen herramientas para medir la Inteligencia Emocional, una de ellas se denomina ESAP-Emotional Skills Assessment Process ® (Proceso de Evaluación de las Destrezas Emocionales) creada por Darwin Nelson PhD y Gary Low PhD de EITRI Emotional Intelligence Training & Research Institute, instituto de investigación sobre el tema a nivel global. Al responder la evaluación, podrás tener una fotografía clara de tu perfil emocional, observando cuáles son las destrezas que ya tienes desarrolladas por ser estas una habilidad natural, por la educación recibida en el hogar y/o por la influencia positiva de otras personas. Así que el trabajo personal será desarrollar día a día aquellas destrezas que lo requieran, mediante la lectura, cursos, conferencias y coaching, así como observación y modelaje de personas excelentes. Al practicar las destrezas de Inteligencia emocional, la personas, podemos adaptarnos mejor a una situación adversa así como a los retos y cambios que nos presenta la vida, ya que estaremos tomando una actitud racional ante dichos eventos, controlando las reacciones naturales del cuerpo y mente ante el estrés y sobretodo recurriendo a una fe activa, que nos lleva a ponernos en acción para anticipar y prevenir todo aquello que esté en nuestras manos. El impacto que la Inteligencia Emocional produce en las empresas, empezando desde la alta gerencia hacia el resto de la organización, es crear un ambiente de trabajo saludable y armonioso que nos lleve a aplicar la máxima creatividad, logrando no sólo disfrutar el trabajo, sino realizar innovaciones y alcanzar una alta productividad. Para practicar la Inteligencia Emocional en estos momentos sin precedentes en el mundo, empecemos por hacer una “pausa” antes de reaccionar bajo estrés, conectémonos unos con otros por teléfono (no solo por redes sociales), mantengámonos sanos a traves de los buenos hábitos, desempolvemos nuestos pasatiempos y demos gracias a Dios por las bendiciones que tenemos. En las siguientes ediciones, estaré ampliando el tema de Inteligencia Emocional. Reciban un saludo afectuoso.

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