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Safran busca técnicos mexicanos que sigan “piloteando” su crecimiento en el país

Víctor Vázquez.
Febrero 01, 2021

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Edgar Ciceño, director de estrategia en Grupo Safran México, instó a jóvenes y adolescentes mexicanos a considerar estudiar una carrera técnica aeroespacial, lo que les permitirá entrar a las filas de esta empresa de origen francés, que tiene una importante presencia en México.

“Nosotros en Safran somos una empresa de técnicos, no somos una empresa de ingenieros, somos, antes que nada, una empresa de técnicos. Yo pienso que sobre los 90,000 empleados que tenemos en el mundo, más del 60 o 70% son técnicos superiores. A los chicos los adoptamos y arropamos para que se integren a una segunda familia, que es una familia de trabajo”, detalló el directivo durante su participación en el webinar "Formación de capital humano en el sector aeroespacial".

En México, esta compañía cuenta con 22 sitios de fabricación o mantenimiento, que representan a siete filiales del grupo. Estas locaciones se ubican en tres estados de la República Mexicana: Chihuahua, Querétaro y Baja California, a las que se une su oficina de representación en Ciudad de México.

“En estos tres estados es donde la actividad se ha desarrollado de manera muy importante, sobre todo  en la última década, en los que prácticamente hemos abierto una planta cada dos años”, añadió Edgar Ciceño.

Es este crecimiento en el país el que orilla a Grupo Safran a tener una constante formación de capital humano. La compañía ha encontrado en el Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica y la Universidad Aeronáutica en Querétaro, aliados sólidos para la obtención de talento.

“Pienso que en empleados de Safran hay 99.999% de mexicanos. Estimamos y queremos mucho a nuestros amigos extranjeros, pero a pesar de ser un grupo internacional de tecnología, de origen francés, aquí en México somos los mexicanos quienes piloteamos los destinos de la empresa”, destacó el ponente.

Grupo Safran llegó a este país hace poco más de 30 años. Durante estas tres décadas, la empresa francesa se ha convertido en el primer empleador de la industria aeroespacial en México, con alrededor de 10,000 asociados.

 

PRODUCCIÓN

La exitosa generación de capital humano de calidad ha permitido la expansión de Safran en el país. 

Edgar Ciceño habló de los casos destacados que la compañía tiene en México. Dijo, por ejemplo, que la mayoría de los toboganes que se emplean en las aeronaves de todo el mundo se desarrollan en la planta Safran Aerosystems (antes Zodiac Aerospace), ubicada en Chihuahua.

En esa misma entidad cuentan con la planta de cableado más grande del mundo, donde “se hacen los cableados de prácticamente todos los aviones comerciales y de tres importantes clientes militares”, explicó. 

En Querétaro, la compañía fabrica piezas y módulos para los motores CFM56 y LEAP, así como para los trenes de aterrizaje de Airbus y Boeing. Mientras que en Baja California produce piezas para cabinas y accionadores y aviónica, entre otros desarrollos.

“La última planta fue abierta en el 2018 y está dedicada a la fabricación del motor LEAP del [Boeing] 737 Max. Este avión, que retoma los vuelos, es un avión más ecológico, más eficiente y que a pesar de los bretes por los que ha pasado, va a volver a volar. Tenemos que construir alrededor de 12,000 motores para el 737 Max y por eso se instaló, en 2018, esta planta en Querétaro”, reveló Ciceño.

Asimismo, el Grupo trajo recientemente a México la filial Safran Electronics & Defense, la cual se instaló  en Mexicali y en la que, entre otras piezas, se producen pedales para el Boeing 787.


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