La rotación de personal es un problema que enfrentan cada vez más empresas en algunas zonas del país y que va más allá de la ausencia de fuerza de trabajo para realizar una actividad.
Si no se identifican y corrigen sus causas a tiempo la organización puede vivir consecuencias como gastos adicionales que le puede llevar incluso a niveles extremos como la quiebra.
Aunque los índices y las causas de rotación a nivel mundial son variables por razones naturales, existen semejanzas que podemos estudiar para tomar medidas a tiempo que nos permitan hacer más eficiente nuestro proceso de producción.
Estudios recientes de causas de rotación en diferentes países nos permiten identificar tres razones que la originan: 1) el trabajador refiere un mal clima laboral 2) no ve posibilidades de crecimiento y desarrollo y 3) considera insuficiente su salario.
En México existen pocos estudios de causas de rotación; sin embargo, es muy probable que coincidan estos tres principales factores como los elementos que provocan que las personas no permanezcan en sus trabajos.
Para evitar la rotación las empresas deben contar con una buena estrategia de reclutamiento y selección y cada vez será más frecuente recurrir a agencias externas que realicen prefiltros que permitan identificar antes de contratar a los trabajadores que tienden a ser inestables.
La selección de personal como parte del proceso también debe ser más eficiente, además el ofrecer vacantes a grupos vulnerables será cada vez frecuente, pues los adultos mayores, las personas con discapacidad y los trabajadores de más de 45 años tienen pocas oportunidades hoy en día por lo que se vuelven más fieles y estables que otros grupos cuando son contratados.
Una vez que se tiene contratado al talento, el otro tema es la retención del mismo mediante capacitación y desarrollo en áreas no sólo técnicas, sino humanísticas que desarrollen en el trabajador un sentido de pertenencia.
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