Hoy en día existe mucha información sobre productividad y la manera en que los equipos de trabajo puedan mejorar su rendimiento en el entorno laboral. Es más, el tema toma cada vez mayor relevancia, ya que aparentemente los estímulos tecnológicos pueden distraer a los empleados de los objetivos de la organización.
La productividad va más allá de la capacidad de aprovechar el tiempo de la mejor manera. Esta se logra, también, contando con competencias esenciales que desarrollen el potencial de las personas en el ámbito laboral y, por consecuencia, impulsen la competitividad y el éxito en los negocios.
Las competencias básicas transversales juegan un papel decisivo en entornos laborales cambiantes, en los que cada vez se trabaja más por proyectos y en equipo.
Son conocidas también como “habilidades blandas” y son las que cada persona desarrolla independientemente del rubro profesional al que se dedique, industria o trabajo.
En una encuesta realizada por OCCMudial, 9 de cada 10 conocen la relevancia de contar con competencias laborales en este proceso.
De acuerdo con este sondeo, las competencias que consideran más relevantes para buscar empleo son análisis de la información (18%), capacidad de escuchar (18%), capacidad de observar (18%), escritura para negocios (14%), trabajo en equipo (12%), comprensión de lectura (12%) y razonamiento matemático (7%).
A continuación se destaca la relevancia de estas competencias para la productividad en las empresas:
Análisis
de la información. El acceso a la información es ilimitado gracias a la
tecnología, por eso es imprescindible saber buscar, clasificar, evaluar y
utilizar la información de manera eficiente.
Escuchar. Se trata de una competencia que facilita el trato con los colegas, la resolución de conflictos, y el dar y recibir instrucciones de forma clara y precisa. Es esencial a la hora de brindar y aceptar críticas constructivas.
Observar. Va mucho más allá de captación a través del sentido de la vista, es un ejercicio para conocer y para aprender de lo que estamos observando. Nos prepara para planificar una estrategia.
Escritura para negocios. El contenido que se distribuye en el ámbito laboral debe ser oportuno, relevante y preciso, y sobre todo, siempre enfocarse a lo que los lectores necesitan saber.
Trabajo en equipo. Saber adoptar un rol positivo permite poner el conocimiento y las capacidades personales al servicio de una labor en la que participan varias personas y en la que se generan sinergias. Implica saber resolver conflictos y tener capacidad negociadora.
Comprensión de lectura. Es fundamental comprender la información escrita que se requiere para desarrollar una acción dentro de una organización, así como asimilar conocimientos necesarios para desempeñarse con éxito en el ámbito profesional.
Razonamiento matemático. El pensamiento matemático nos lleva a la resolución efectiva de problemas a través del razonamiento. Es una competencia esencial para enfrentar retos con éxito.
Las
competencias anteriormente mencionadas son básicas y deberían aprenderse en
todo el proceso educativo; sin embargo, pueden adquirirse haciendo uso de la
tecnología con cursos y certificaciones en línea que ayudarán a los estudiantes
a tener éxito en su trayectoria profesional y los harán distinguirse en los
proceso de reclutamiento y selección.
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