Uno de los
términos que, en los últimos años, ha tomado gran relevancia y, además, ha dado
mucho de qué hablar y generado controversia es el término ‘millennial’, aquella
generación que nació en el mundo emergente de la tecnología, por lo que forma
parte de su vida cotidiana.
Una de las
características de estos adultos jóvenes, que oscilan entre los 18 y 34 años,
es que fue la primera generación que tuvo acceso a Internet durante sus años de
formación. Por ello, están más conectados a la tecnología que cualquier otra
generación anterior, lo que les ha permitido adaptarse fácilmente a los cambios
que la industria presenta. Se podría decir que la relación de los ‘millennials con la tecnología es
lo que los hace únicos.
Es importante
destacar que la mayoría de los miembros de esta generación están iniciando sus
carreras profesionales y son, por lo tanto, un motor importante para la economía
en las próximas décadas; sin embargo, los ‘millennials’ han enfrentado retos
sustanciales al ingresar a la fuerza de trabajo.
No obstante, en
la última década, y concretamente en materia de competitividad, México ha
mostrado un constante descenso, pasando de la posición 32 a la 55 dentro del
‘ranking’ de competitividad, según
datos del Foro Económico Mundial.
Dicho fenómeno
trae consigo fuertes consecuencias, entre ellas, que el país deja de ser
atractivo para la inversión nacional y extranjera y por ende, las empresas
dejan de producir por no poder competir en el mercado internacional.
Sin embargo, una
de las herramientas más eficientes para detonar la productividad de las
empresas y del país, en toda la cadena de producción, son las Tecnologías de
Información y Comunicaciones (TIC), mismas que han registrado un creciente
desarrollo en los últimos años. Algunos expertos sostienen que, en los últimos
cinco años, cerca del 30% del crecimiento en países como EE.UU., se debe al uso
de dichas tecnologías.
En ese contexto,
se espera que para el 2020, los ‘millennials’ ocupen más de un tercio de la
fuerza laboral, por lo que la implementación de estrategias educativas es de
vital importancia para el desarrollo comercial y tecnológico del país.
Y las compañías, ¿cómo hacen frente a este reto?
Hoy en día las
TIC son un ámbito, una competencia y una opción laboral para los jóvenes.
Asimismo, resulta ser requisito indispensable, en la mayoría de las posiciones
ofertadas en el mercado, el manejo de la tecnología. Los ‘millennials’ tienen
la capacidad de integrarse laboralmente y las TIC resultan ser no solo
herramientas de trabajo, sino también un interesante ámbito de desarrollo
profesional.
En ese sentido
diversas empresas, entre ellas Siemens, brindan oportunidades globales en PLM
como respuesta a las necesidades actuales y futuras del mercado. El reto es
desafiar y fomentar el crecimiento de los futuros líderes empresariales en
áreas como ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, por mencionar
algunas, a través de programas académicos que propicien el desarrollo y
formación de la próxima generación de diseñadores, ingenieros y científicos de
computación.
Si bien existen
desafíos importantes por cumplir, estamos conscientes en que es necesario tomar
medidas para enriquecer la oferta educativa, proporcionar mayores y mejores
oportunidades de capacitación y conexión con los trabajos. Según los expertos,
ninguna otra generación ha estado mejor preparada para superarlos que los ‘millennials’.