En México, 8 de cada 10 CEO confían en la resiliencia de la economía durante los próximos seis meses. Y aunque a nivel mundial ocho de cada 10 líderes prevén una recesión durante los próximos 12 meses, en el país sólo tres de cada 10 coinciden, reveló el estudio KPMG 2022 CEO Outlook.
De acuerdo con el estudio, realizado a 1,325 altos directivos a nivel global, más de la mitad (58%) esperan que la recesión sea breve y ligera; en México están de acuerdo con ello tres de cada 10.
Los líderes mexicanos sienten una mayor confianza sobre la resiliencia de la economía en los próximos seis meses, con 8 de cada 10, y a nivel global siete de cada 10. Así como 66% confían en las expectativas de crecimiento de la economía mundial durante los próximos tres años y 76% confía en el crecimiento de su empresa durante los próximos tres años.
“A pesar de los recientes impactos geopolíticos y de salud a los que nos hemos enfrentado y que han afectado el panorama de la dirección general en México, es reconfortante ver cómo el optimismo y la confianza en la economía mundial ha ido incrementando en el último año. Aunque es cierto que aún con este positivismo hacia el futuro, las y los CEO han tomado decisiones importantes a corto plazo en cuanto a talento y tecnología para mantenerse estables ante la incertidumbre económica”, comenta Víctor Esquivel, socio director general de KPMG en México y Centroamérica.
De acuerdo con el documento, el relativo optimismo del país podría estar relacionado con el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC), ya que, ante las restricciones de movilidad en China y otros temas geopolíticos, compañías alrededor del mundo planean trasladar sus centros de producción a lugares más cercanos y seguros con respecto a los mercados finales, o lo que conocemos como nearshoring. Esto, de acuerdo con KPMG, es positivo, pues si efectivamente se materializara una recesión global, esta se debería a fenómenos coyunturales en el mercado internacional y no a temas estructurales y duraderos.
Entre los hallazgos del estudio, los desafíos más apremiantes entre los líderes mexicanos se encuentran los riesgos por las tecnologías emergentes y disruptivas, con 18% frente a un 12% a nivel global. Seguido por los riesgos ambientales o relacionados con el cambio climático (10%); los riesgos reputacionales o de marca (10%); y los riesgos operativos y regulatorios (8%, cada uno).
Si bien la ciberseguridad ha caído de los cinco principales riesgos para el crecimiento durante 2022, el ambiente informático evoluciona y ocho de cada 10 CEOs mexicanos indica que su organización ve la ciberseguridad como una función estratégica y como una posible fuente de ventaja competitiva.
Ante el escenario de riesgos latentes y reales, sorprende el apetito que existe entre las y los CEO por realizar fusiones y adquisiciones para los próximos tres años, de 40% de la muestra en México. Mientras tanto 52% tiene el interés para realizar alguna fusión o adquisición.
“Lo cual quiere decir que los empresarios mexicanos están abiertos a una estrategia de invertir en fusiones y adquisiciones, pero no es su prioridad principal”, reconoce el estudio.