Como
una manera de ayudar al empresario a encontrar un modelo que mejore
notablemente sus ventas y esté fundamentado tanto en el cerebro como en el
comportamiento humano, la Cámara Nacional de la Industria de Transformación
(Canacintra) en León realizó el taller denominado “Neuroventas”, el cual fue
impartido por Fernando Ralero, de ADV Consulting.
El
experto mencionó que antes vender era solo una técnica; sin embargo, hoy
también es una ciencia, señaló que es importante entender por qué se denomina
“neuroventas” y por qué se vuelven relevantes en un contexto comercial y
empresarial.
“Primero
tenemos que entender cómo funciona el cerebro desde un punto de vista evolutivo y cómo eso lo podemos orientar para
tener mejores resultados en ventas, entendiendo cómo funciona la mente del
vendedor, pero también la mente del comprador”.
El
experto explicó que es una práctica enfocada a que la gente entienda lo que
ocurre dentro de su cabeza y tenga herramientas para poderlas utilizar y
vender.
Aseveró
que hoy en día suele ser demasiado fácil, pues se está en un mundo muy
competitivo, donde casi todos los productos y servicios se están volviendo un
commodity perdiendo diferencias entre sí.
“Los
seres humanos no sabemos por qué compramos lo que compramos y con Neuroventas
podemos descubrir cómo hacer que elijan tu producto o servicio sin hacer
grandes esfuerzos, es cosa de prometer menos y lograr más”.
En
el mundo del marketing, mencionó que se ha vivido con una creencia del cómo
funciona el cerebro; no obstante, la ciencia ha demostrado que se ha caído en
equivocaciones, pues por medio de sensores en el cerebro ha sido posible
establecer qué parte del cerebro se activa cuando se ve o percibe cierto tipo
de publicidad.
“Esto
permite replantear no solo la publicidad, sino también los argumentos, entonces
al darnos cuenta de que tradicionalmente hemos hecho mal, pues a la hora de
cambiarlo podemos tener muchos mejores resultados”, refirió.
Finalmente,
Fernando Ralero explicó que el tema de neurociencias es nuevo, pues se habla de esto apenas desde
hace 10 años, por lo que, hay pocas empresas que invierten en ello para incluso
instaurar laboratorios de neurociencias en sus compañías y conocer el mercado
activo de sus productos.