La suma de factores como la inflación, Covid-19, desabasto de materiales e incluso la guerra en entre Rusia y Ucrania han provocado que a mitad del 2022 los costos de las operaciones del sector de la construcción esté promediando incrementos de hasta un 35%, principalmente en el acero y en el cemento.
Aunado a esto, con base en estudios de la empresa Calidad Cloud, el 80% de las pérdidas y atrasos que se generan en los proyectos de construcción son por trabajos mal ejecutados, rehechos y por no contar con un control de calidad preciso.
Robinson Fuentes, CEO de Calidad Cloud, precisó que es de vital importancia contar con un software como el que ellos desarrollaron para el control y la gestión de producción de obras. “Nuestra solución ofrece tener visibilidad con analítica en todo el círculo de calidad completo, es decir, desde la excavación hasta la postventa o entrega del proyecto”.
Calidad Cloud nació en Chile, con la finalidad de digitalizar el sector de la construcción; su paso por Perú y Colombia dieron la visión de enfrentar al mercado con mayor potencial de Latinoamérica: México.
“Llegamos a México con el objetivo de digitalizar la industria de la construcción. Las últimas estadísticas de Mackenzie indican que la construcción está casi debajo de la agricultura en la digitalización y modernización de sus procesos productivos. Así que el desafío es grande, pero tenemos mucho aprendizaje, por Calidad Cloud han pasado 3,600 proyectos industriales, mineros, parques de energía renovables, entre otros”, comentó Fuentes.
El software de Calidad Cloud ayuda a las constructoras contratadas por empresas que desean ampliar o construir una nueva planta productiva. “El sector de la construcción en México tiene una percepción muy positiva, la industria 4.0 y la incorporación de tecnologías han podido potenciar la digitalización. La oportunidad más grande que vimos en el país es el volumen de economía que representa en Latinoamérica”, finalizó el CEO de Calidad Cloud.
Al día de hoy, Calidad Cloud cuenta con 14,000 usuarios activos y 750 proyectos en desarrollo, y con su llegada a México pretenden pasar la barrera de 2,000 proyectos, visualizando las entidades con mayor demanda inmobiliaria: Guadalajara, Monterrey y Ciudad de México.