Estados Unidos y México refuerzan su colaboración económica mediante una serie de iniciativas que buscan consolidar inversiones, potenciar el nearshoring y fortalecer la integración de las cadenas de valor en la región. Durante SelectUSA 2025 Ciudad de México, líderes empresariales, inversionistas y representantes gubernamentales, discutieron el papel estratégico de ambas naciones como socios económicos clave.
Santiago Dávila, oficial de asuntos exteriores del Departamento de Comercio de los Estados Unidos, enfatizó la importancia del foro como motor del desarrollo económico binacional. “Hoy tenemos aquí a 40 organizaciones de desarrollo económico provenientes de diferentes partes de Estados Unidos, junto con inversionistas mexicanos y expertos destacados. Este evento no solo es una oportunidad para promover la inversión, sino para construir puentes que fortalezcan nuestras economías y beneficien a nuestras comunidades”, afirmó.
El intercambio de ideas y el acceso a herramientas clave son fundamentales para generar un impacto positivo en la región.
En la misma línea, Pedro Casas, director ejecutivo de la Cámara Americana de Comercio (AMCHAM), destacó el creciente interés de las empresas mexicanas por ampliar su presencia en Estados Unidos. “El apetito de México por invertir en Estados Unidos es evidente, y esto es un reflejo de la profunda integración económica entre nuestras naciones. No solo somos socios comerciales; somos parte de un sistema de coproducción que añade valor a nuestras exportaciones y fortalece nuestras cadenas productivas”, comentó.
Casas también resaltó el éxito de eventos como SelectUSA, una iniciativa que facilita la inversión extranjera en Estados Unidos. “El año pasado, México tuvo la mayor delegación en la historia de este evento en Washington, sin embargo, debemos aspirar a más. Hay países asiáticos que nos superan en participación, y es esencial que enviemos un mensaje claro: invertir en Estados Unidos es también invertir en México, porque nuestras economías están profundamente interconectadas”.
Oportunidades en el nearshoring y el desarrollo de startups
Mark Johnson, encargado de negocios de la Embajada de Estados Unidos en México, señaló que el contexto actual presenta oportunidades sin precedentes para la inversión.
“Hoy, las empresas buscan ubicaciones que les ofrezcan soluciones integrales. Estados Unidos sigue siendo el principal destino de inversión global, no solo por su economía, sino por su capacidad de innovación y creatividad”.
Johnson también subrayó la importancia del nearshoring como una herramienta estratégica para reducir costos, mejorar tiempos de entrega y fortalecer las cadenas de suministro. “Estados Unidos y México estamos unidos geográficamente para siempre, y esa es una ventaja que debemos aprovechar. Somos socios en comercio, cultura, seguridad y, sobre todo, en negocios. No hay mejor momento para reforzar esta relación”.
El papel de las startups también fue destacado como una pieza clave en la relación económica bilateral. John Breidenstine, ministro consultor de la Embajada de Estados Unidos, compartió los logros del programa SelectUSA Tech, que desde su creación ha apoyado a miles de empresas emergentes.
“Hemos facilitado más de 250,000 millones de dólares en inversiones desde 2011, generando más de 230,000 empleos en Estados Unidos. Las startups mexicanas han encontrado en SelectUSA una plataforma para lanzar y escalar sus operaciones, y esto no solo beneficia a las empresas, sino que también impulsa la innovación en nuestra región”.
Una de las ideas más repetidas por los participantes fue el concepto de integración económica como base para el crecimiento conjunto.
“Estados Unidos es el país con más contenido mexicano en sus exportaciones. Esto refleja que ya no somos solo socios comerciales, sino un sistema integrado de producción que añade valor en ambos sentidos”, explicó Casas.
Johnson amplió esta idea al afirmar que la creatividad y la innovación son las mayores aportaciones de los inversionistas extranjeros. “Lo que más valoramos no es solo el capital que se invierte, sino las ideas, la energía y la pasión que traen consigo. Muchos de los mejores proyectos en Estados Unidos provienen de personas que han llegado desde otros países con una visión diferente y con el deseo de contribuir al desarrollo de nuestras comunidades”.
Finalmente, Dávila concluyó destacando que este tipo de encuentros son esenciales para fortalecer la relación entre ambos países. “Invertir en Estados Unidos no solo beneficia a los inversionistas mexicanos; también impulsa el desarrollo económico en México. Es una relación de beneficio mutuo que debemos seguir alimentando”, aseguró.