Con una inversión de 15 millones de dólares y como parte de su estrategia de expansión y diversificación, Oradel Industrial Center anunció la construcción de una subestación eléctrica privada, la cual busca atender la creciente demanda energética del sector industrial en la región.
La subestación, actualmente en construcción, tendrá una capacidad inicial de 60 megavatios y a diferencia de otros proyectos anteriores, esta infraestructura será operada de forma 100% privada, sin transferencia a la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Oradel será responsable de la administración, facturación y venta de la energía directamente a sus clientes, sin limitaciones para comercializarla con terceros.
Carlos Alfredo Montoya Vega, socio fundador de Forum Commercial Real Estate México y actual responsable de la comercialización y administración de propiedades de Oradel, destacó que esta nueva unidad de negocio se independiza de la operación inmobiliaria tradicional y responde a una oportunidad para suplir la demanda insatisfecha de energía eléctrica, clave para atraer a empresas intensivas en consumo energético, como centros de datos, fabricación avanzada y logística.
"Tener energía disponible es hoy el principal diferenciador para atraer industria. Existen muchas otras variantes a considerar, pero si no hay energía no es posible la operación. Esta subestación nos da una ventaja competitiva inmediata", afirmó Montoya.
La subestación forma parte del Oradel Industrial Rail Center, el segundo parque industrial de Oradel, con cerca de 500 acres y alrededor de 700,000 pies ya desarrollados. diseñado con ventajas logísticas clave: entrada del ferrocarril por el sur, acceso vehicular por el norte y una terminal de descarga de combustibles.
Además, se cuenta con 3 inmuebles, dos de ellos, edificios especulativos de 220,000 y 260,000 pies cuadrados así como cerca de 12 lotes disponibles, ajustables según las necesidades de los clientes.
Con motivo de su 25 aniversario, Oradel busca consolidar una nueva etapa de crecimiento con infraestructura energética propia, mayor autonomía operativa y una visión orientada a detonar el potencial binacional de la región. Por lo que, la inversión en la subestación eléctrica privada es un reflejo de esa visión.