En un entorno global marcado por incertidumbres económicas y tensiones geopolíticas, la economía mexicana muestra resiliencia en sectores clave. Con base en el reciente informe CIAL Insights, elaborado por CIAL Dun & Bradstreet, se destacan los principales movimientos económicos de México y se subraya el papel crucial del comercio exterior y la interacción entre las políticas nacionales e internacionales.
Exportaciones manufactureras impulsan el crecimiento económico
En abril de 2025, las exportaciones manufactureras alcanzaron los 48,606 millones de dólares, representando el 90% del total exportado, con un crecimiento anual de 6.9%. Este desempeño reafirma la importancia de las manufacturas como motor económico. Sin embargo, dentro del sector, las dinámicas varían. Las exportaciones automotrices cayeron un 1.9% en abril y acumulan un retroceso de 3.3% en lo que va del año. Las exportaciones de metálicas básicas, por otro lado, crecieron un 12.1% anual en el primer cuatrimestre, incluso frente a nuevos aranceles de hasta el 50% impuestos desde mayo.
Comercio exterior posiciona a México como líder global
El informe destaca que el comercio exterior representa el 73.1% del PIB estimado para 2025, posicionando a México como una de las economías más abiertas del mundo. Este indicador supera ampliamente a socios comerciales como Canadá (52%) y Estados Unidos (18.4%). Desde la entrada en vigor del TLCAN en los años noventa, el país ha mantenido una sólida relación con el comercio internacional, alcanzando un pico histórico del 80.6% en 2022.
Desafíos internos
En el ámbito doméstico, algunos indicadores reflejan áreas de oportunidad. De acuerdo con datos del INEGI, la economía mexicana habría retrocedido un 0.3% anual en mayo, con una caída del 1.1% en el sector secundario.
El consumo privado, que representa el 69% del PIB, experimentó su primera contracción anual (-0.8%) desde 2021, afectado por un deterioro en empleo, remesas y salarios. La inversión fija bruta disminuyó un 6.8% anual en el primer trimestre, acumulando dos trimestres consecutivos de contracción.
La política monetaria de México continúa ajustándose a las condiciones globales. Se espera que Banxico reduzca su tasa de interés a 8.00%, lo que marcaría una divergencia con la Reserva Federal de EE. UU., que ha mantenido su tasa en 4.50%. El diferencial entre ambas tasas podría situarse en 375 puntos base, el nivel más bajo desde 2016. A pesar de estos ajustes, el tipo de cambio ha mostrado estabilidad, con un promedio cercano a los 19 pesos por dólar.
Señales mixtas en el principal socio comercial
El desempeño de la economía estadounidense, clave para México, también muestra contrastes:
El desempleo se mantiene en 4.2%, pero la creación de empleos no agrícolas desaceleró con 619,000 nuevos puestos entre enero y mayo. La producción de autos cayó un 4.8%, mientras las ventas crecieron un 7.0% en el mismo periodo. El consumo minorista se mantuvo firme, con un aumento del 4.4% en los primeros cinco meses del año.
CIAL Insights subrayó que el balance entre apertura económica, estabilidad interna y estrategias internacionales será crucial para enfrentar los retos actuales. Aunque algunos sectores enfrentan presiones, otros han mostrado capacidad de adaptación y resiliencia, posicionando a México como un actor relevante en el comercio global.