En los últimos años, México ha registrado un notable aumento en las inversiones en centros de datos, impulsadas por la creciente demanda de servicios digitales y la transformación digital. De acuerdo con la Asociación Mexicana de Data Centers (MEXDC), se estima que este sector atraerá una inversión directa de 9,192 millones de dólares en los próximos cinco años.
¿Qué es un centro de datos?
Un centro de datos o data center es una instalación física destinada para alojar sistemas computacionales y componentes relacionados, como redes de telecomunicaciones y almacenamiento. Estos centros actúan como el "cerebro" y "sistema nervioso" de Internet, permitiendo la gestión y almacenamiento de enormes volúmenes de datos.
Los data centers contienen servidores que procesan información de sitios web, aplicaciones y servicios en la nube. Además, integran sistemas avanzados de seguridad, control climático y suministro eléctrico para garantizar la protección y disponibilidad continua de los datos.
Este tipo de infraestructura es fundamental para el desarrollo tecnológico y económico del país, ya que permite a las empresas de telecomunicaciones y servicios en la nube operar eficientemente. Al mismo tiempo, fortalece la competitividad de México en el mercado global.
El nearshoring impulsa la demanda
El auge en la construcción de centros de datos está estrechamente vinculado con el nearshoring, una tendencia que ha llevado a múltiples empresas a trasladar operaciones hacia México para optimizar costos y tiempos de logística. La creciente demanda por procesar grandes volúmenes de datos de manera segura y eficiente ha incrementado la necesidad de centros de datos de alta capacidad y confiabilidad.
Querétaro: El epicentro de la innovación
Querétaro ha emergido como el núcleo de la transformación digital en México, albergando numerosos proyectos de centros de datos de gigantes tecnológicos como Microsoft, Amazon y Google. Su ubicación estratégica, infraestructura avanzada y ecosistema de innovación han consolidado al estado como uno de los destinos más atractivos para este tipo de inversiones.
Impacto económico y social
Estas inversiones tienen un impacto positivo en varias dimensiones:
Generación de empleo directo e indirecto: Desde la construcción y mantenimiento de los centros, hasta el personal técnico especializado.
Atracción de empresas complementarias: Las inversiones en data centers crean un ecosistema que fomenta la llegada de más empresas tecnológicas.
Sostenibilidad y eficiencia energética: Muchos centros de datos están diseñados para operar bajo estándares de eficiencia ambiental, contribuyendo a la reducción del impacto energético.
Mejora de la infraestructura nacional: La instalación de estos centros requiere avances en telecomunicaciones y sistemas de energía, lo que beneficia tanto a las empresas como a la sociedad en general.
Retos y oportunidades
El crecimiento acelerado del sector también plantea desafíos como garantizar un suministro energético confiable y sostenible, así como proteger los datos y asegurar la privacidad de los usuarios en un entorno de alta digitalización.
A pesar de estos retos, México tiene el potencial de convertirse en un hub global de datos, conectando América Latina con el resto del mundo y generando un fuerte impacto económico y social.