A pesar de un crecimiento estimado del PIB del 1.5% para 2024, las oportunidades para México siguen siendo considerables en sectores estratégicos. La relocalización de empresas al país, impulsada por el nearshoring, representa una ventaja competitiva clave, permitiendo a México posicionarse como un destino atractivo para la inversión.
Para maximizar este potencial, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) recomienda fortalecer el entorno de negocios mediante políticas que faciliten el crecimiento y la formalización de nuevas empresas. Además, el desarrollo de un sistema financiero robusto y mejoras en infraestructura y seguridad pueden consolidar a México como un centro de manufactura y exportación de referencia en América Latina.
En términos de consumo, aunque los incrementos son moderados, el CEESP reveló que los sectores de abarrotes, autoservicios y artículos de uso personal muestran resiliencia, lo cual indica una base de consumo estable. La adopción de prácticas sustentables y el fortalecimiento del estado de derecho también representan oportunidades para atraer una mayor relocalización de empresas.
El entorno económico global en 2024-2025 presenta desafíos, pero México tiene la capacidad de aprovechar estas oportunidades mediante ajustes estratégicos en política pública y fomento al sector formal, garantizando un clima propicio para la expansión de la inversión extranjera y el fortalecimiento de su mercado interno, indicó el Centro en su análisis semanal.