La revolución de la inteligencia artificial (IA) sigue transformando los centros de datos, exigiendo innovaciones en eficiencia energética y redefiniendo la forma en que las empresas gestionan su infraestructura. De acuerdo con Koen ter Linde, vicepresidente senior y presidente de Soluciones de Conectividad y Cableado en CommScope, la demanda de computación impulsada por la IA ha superado todas las expectativas.
“Lo que predijimos hace un año se ha cumplido con creces. El crecimiento exponencial de la IA está forzando a la industria a implementar estrategias más eficientes, resolver problemas con creatividad y construir infraestructuras más rápido que nunca”, afirmó ter Linde.
Con base a un análisis de Goldman Sachs, se espera que la demanda energética de los centros de datos aumente hasta un 160% en los próximos años. Actualmente, estos centros consumen el 2% de toda la electricidad global, cifra que podría duplicarse para 2026 según la Agencia Internacional de la Energía. Este crecimiento está impulsado por las capacidades intensivas de procesamiento de las GPU, esenciales para satisfacer la creciente demanda de IA.
La industria ya está respondiendo a estos desafíos con innovaciones en construcción y eficiencia energética. “La adopción de sistemas de refrigeración más avanzados, como los enfriados por agua, y la transición a fuentes de energía como la nuclear son pasos importantes hacia un modelo más sostenible y escalable”, explicó ter Linde.
Además, la infraestructura de fibra óptica está evolucionando para adaptarse a las demandas de conectividad de la IA. Los centros de datos están adoptando soluciones de fibra de alta densidad para manejar la complejidad creciente, mientras optimizan el uso del espacio físico.
“La IA no solo está cambiando la forma en que interactuamos con la tecnología, también está impulsando a los centros de datos a adaptarse rápidamente. En 2025, veremos cómo estas estrategias innovadoras se convierten en la norma”, añadió.
Otra tendencia destacada es el uso de IA generativa dentro de los propios centros de datos para gestionar recursos humanos limitados. Esto permite a equipos de TI menos avanzados operar de manera eficiente, aliviando tensiones laborales y optimizando operaciones.
A medida que la demanda de IA sigue creciendo, los centros de datos están llamados a liderar con soluciones innovadoras que conviertan la promesa tecnológica en beneficios tangibles. “La capacidad de adaptarnos y evolucionar será lo que defina el éxito de nuestra industria en esta nueva era”, concluyó el directivo.