Pasar de fabricar vehículos de gasolina a manufacturar vehículos eléctricos no es tarea fácil. El compromiso de Honda por una movilidad más sostenible viene de muy atrás, por lo que lleva gran ventaja en este segmento, comprobándolo con su más reciente prototipo, el Honda SUV e: prototype.
De forma más precisa, los esfuerzos de la compañía automotriz por una sociedad eléctrica se remontan a hace más de dos décadas, con el nacimiento de Honda Insight.
En un momento donde lo eléctrico tenía poco éxito en el mercado, Honda apostó por marcar el camino a seguir hacia una transportación más limpia. Desde entonces, la empresa se ha dedicado a desarrollar soluciones de movilidad sostenible, como los motores híbridos y eléctricos.
Honda ha seguido innovando y creando ideas que revolucionan la industria y la impulsan hacia el futuro: como el motor VTEC (1989); el primer coche híbrido de producción Honda Insight (1999 en Europa); elFCX Clarity (2008) que fue primer coche de pila de combustible de hidrógeno en comercializarse, la nueva tecnología Traffic Jam Pilot.
En 2021 se comercializarán en la industria automovilística una cantidad de baterías de iones de litio 20 veces superior a la de 2010, según datos de la Unión Europea.
El crecimiento en la demanda, fomentado por el gran impulso legislativo de los gobiernos, aumentará todavía más el ritmo de producción. Para avanzar hacia una movilidad sostenible, urge desarrollar procesos de reutilización y reciclado que eviten de forma temprana la acumulación de residuos tecnológicos.
Para llevar a cabo este proceso, Honda se asoció con SNAM (Société Nouvelle d’Affinage des Métaux), que utiliza un transporte seguro y con bajas emisiones de carbono. Si las celdas de la batería están dañadas no es posible darle una segunda vida, y se procede a extraer los materiales de valor.
Una vez extraídos, estos materiales reciclados pueden utilizarse, por ejemplo, en la producción de nuevas baterías. Otros materiales de uso común, como el cobre, el metal y los plásticos, se reciclan y se ofrecen al mercado para su uso en la producción de aplicaciones diversas.
Entre otros de los logros recientes de la marca, está el lanzamiento del Honda e, el primer vehículo eléctrico de baterías de Honda en Europa, no ha hecho más que acumular premios. Todos estos logros llevan a la conclusión de que la industria automovilística es clave para la transición hacia una economía descarbonizada, limpia y sostenible.
El fabricante automotriz seguirá invirtiendo y orientando sus esfuerzos a una sociedad limpia y todo ese esfuerzo se reflejará en beneficios de cada producto que la marca comercialice en el mundo.