La Asociación Mexicana de la Industria de Tecnologías de Información (AMITI), junto con el Information Technology Industry Council (ITI) y TECHNATION de Canadá, emitió una declaración conjunta en la que enfatiza la relevancia estratégica del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) para el fortalecimiento económico y tecnológico de la región. Las organizaciones hicieron un llamado a los responsables políticos para priorizar su renovación y reforzar las disposiciones que han impulsado la innovación, la inversión y la seguridad económica.
El T-MEC ha sido una herramienta clave para establecer un entorno comercial predecible y facilitar la integración económica en América del Norte. Desde su entrada en vigor, el tratado ha contribuido al fortalecimiento de las cadenas de suministro regionales, el incremento de la inversión extranjera directa y la promoción de la colaboración tecnológica entre los tres países. Según la declaración, estos logros han beneficiado a las empresas y también han generado oportunidades de empleo y mejorado la competitividad global de la región.
Un pilar para la economía digital
Uno de los aspectos más innovadores del T-MEC es su capítulo dedicado al comercio digital, que establece normas para garantizar el libre flujo de datos, proteger la privacidad y reducir barreras digitales. Estas disposiciones han permitido a las empresas tecnológicas operar de manera más eficiente, acceder a nuevos mercados y ofrecer soluciones digitales de vanguardia.
El sector tecnológico destacó que estas reglas han sentado las bases para una economía digital más conectada, facilitando el comercio electrónico, los servicios digitales y la innovación en áreas como inteligencia artificial, ciberseguridad y automatización.
Con la próxima revisión del T-MEC en el horizonte, las asociaciones tecnológicas resaltaron la importancia de abordar ciertos desafíos relacionados con su implementación. Entre las preocupaciones mencionadas se encuentran las posibles barreras regulatorias que podrían frenar el comercio digital y la necesidad de actualizar algunas disposiciones para reflejar las tendencias emergentes en tecnología y sostenibilidad.
Asimismo, hicieron hincapié en la importancia de involucrar al sector privado en este proceso, asegurando que las políticas comerciales reflejen las necesidades reales de las industrias y los mercados. Esto, según la declaración, permitirá que el tratado continúe siendo un instrumento relevante y efectivo en un mundo cada vez más interconectado y digitalizado.
Hacia un futuro competitivo
El mensaje conjunto subraya que el T-MEC no solo es un motor económico para América del Norte, sino también un elemento esencial para la competitividad global de los países miembros. En un contexto de creciente competencia internacional, la renovación del tratado se presenta como una oportunidad única para reforzar los lazos comerciales y fortalecer el liderazgo tecnológico de la región.
La industria tecnológica destacó que la estabilidad y previsibilidad que ofrece el T-MEC son fundamentales para atraer inversión y fomentar la innovación en áreas estratégicas. Además, las asociaciones coincidieron en que el éxito futuro del acuerdo depende de su capacidad para adaptarse a los cambios en el entorno económico y tecnológico global.
Con este llamado, las principales asociaciones tecnológicas de América del Norte buscan garantizar que el T-MEC siga siendo un catalizador para el crecimiento económico, la innovación y la integración regional, enfrentando los retos del futuro con una visión conjunta y estratégica.