En la gestión empresarial, la movilidad, tradicionalmente, ha sido percibida como un gasto fijo (combustible, servicios de mantenimiento, refacciones, seguros y otros costos asociados a la operación de flotas). Sin embargo, esta visión reduce el verdadero potencial de la movilidad.
Para Pablo Chiappetta, director general de Mobility para Edenred México, “cada carga de combustible y cada revisión mecánica son, en realidad, fuentes de datos capaces de guiar decisiones estratégicas”.
La digitalización y las nuevas herramientas tecnológicas han permitido que la administración de la movilidad deje de limitarse a controlar gastos y se convierta en un motor de información procesable. Plataformas como Ticket Car y Mantenimiento Fleet transforman transacciones rutinarias en información útil para la gestión.
“Una recarga de gasolina deja de ser solo un egreso y se transforma en un insumo para optimizar rutas, anticipar mantenimientos, reducir fraudes y medir la eficiencia real de cada vehículo. Así, la movilidad deja de ser únicamente un costo operativo y se convierte en un tablero de control integral de la operación”, indicó Chiappetta.
El dato detrás del combustible
Tener control sobre el gasto de combustible permite asignar saldos de manera automática, establecer parámetros de consumo por unidad y generar reportes detallados que revelan patrones de uso. “La información generada por herramientas de medición ayuda a que los administradores tomen las mejores decisiones, ya que les proporciona evidencia y no se basa en suposiciones”, explicó Chiappetta. Este enfoque permite a las empresas identificar oportunidades de eficiencia, detectar anomalías en el consumo y tomar decisiones informadas sobre la operación de su flota.
De manera paralela, contar con visibilidad completa de los servicios de mantenimiento —desde la validación de presupuestos hasta la consolidación de facturas— permite estandarizar procesos, mantener un control de calidad y obtener una visión precisa de la salud de cada unidad. “El mantenimiento de flotas deja de ser una actividad reactiva y pasa a convertirse en una fuente de inteligencia predictiva, que además procura la seguridad de los operadores al garantizar unidades 100% funcionales”, señaló el directivo.
De acuerdo con estudios especializados, la planificación del mantenimiento puede mejorar la productividad hasta en 25%, reducir 30% los costos asociados y prolongar la vida útil de la maquinaria y equipo hasta en 50%. La gestión basada en datos permite que los equipos se mantengan en condiciones óptimas, se eviten fallas inesperadas y se optimicen los recursos de manera sistemática.
Electromovilidad: el nuevo horizonte de datos
La transición hacia la electromovilidad amplía aún más el potencial de la movilidad como generador de información estratégica. Chiappetta destacó que “la electromovilidad aporta datos estratégicos sobre patrones de consumo, eficiencia energética y reducción de emisiones. No solo es una alternativa sostenible, sino un nuevo frente de información para la toma de decisiones empresariales”. Edenred México se ha unido a la Electromovilidad Asociación México (EMA) para impulsar la adopción de vehículos eléctricos y facilitar la recopilación de datos que puedan guiar la operación y optimización de las flotas.
El análisis de información generada por los vehículos eléctricos permite a las empresas identificar patrones de uso, diseñar estrategias de recarga eficientes, reducir el impacto ambiental y mejorar la gestión energética. La movilidad, entonces, deja de ser solo un gasto y se convierte en un activo de información que aporta valor estratégico.
“La movilidad no es únicamente un gasto operativo. Es un activo de información que, bien administrado, puede marcar la diferencia en la competitividad de las empresas. Verla así —como fuente de datos y no solo como costo— es el paso que distingue a las organizaciones que se preparan para el futuro de aquellas que permanecen ancladas en el pasado”, concluyó Chiappetta.