La nueva política económica del gobierno de los Estados Unidos y el anuncio de los posibles aranceles a las importaciones de México y Canadá ha obligado a expertos en materia del comercio exterior en México, así como inversionistas a replantearse estrategias que permitan continuar con las operaciones de la industria manufacturera; lo anterior se expresó durante el webinar denominado “Cambio de Gobierno en Estados Unidos, Retos y Oportunidades para el Comercio Internacional en México” realizado por México Industry y Banco Base.
Para Ana Azuara, Gerente de análisis económico y especialista en el mercado de comodities en Banco Base, la imposición de aranceles anunciada por el Gobierno de Estados Unidos, tiene que ver más por la relación de México con China, misma que se ha ido reforzando en los últimos años lo que afecta el plan del presidente de los Estados Unidos de seguir consolidándose como la economía más grande del mundo.
“El objetivo es que los Estados Unidos continúe siendo la economía más grande del mundo y su mayor problema más que con México es con China, sobre todo en el tema comercial” comentó Ana Azuara.
La estrategia económica de la nueva administración de los Estados Unidos ha generado reacciones de algunas empresas principalmente del ramo automotriz, mismas que comienzan a considerar la opción de relocalizar algunos procesos productivos de México hacia otros países, sin embargo, a decir de Javier Ortiz, director nacional del Comité de Comercio Exterior y Aduanas de Index Nacional, estas medidas fortalecerían más a China ya que sería más abarato para las empresas importar ciertos materiales del país asiático que de México.
“Inclusive hay algunas mercancías que ahorita con las nuevas tarifas podría ser más barato importarlas de China que de México, quedaríamos en una desventaja con China y Estados Unidos en lugar de quitarse esa dependencia de ese país la estaría incrementando” comentó.
No obstante, el intercambio comercial entre ambos países sigue siendo un indicador a considerar al momento de tomar decisiones, toda vez que el 80 por ciento de las mercancías que exporta México se dirigen a los Estados Unidos y en gran parte son empresas americanas, por lo que se espera que estas mismas compañías alcen la voz para evitar la imposición de nuevas tarifas.
“Creo que el gobierno de México se ha manejado bien, con la cabeza fría, no se sube el ring, pero de entrada México exporta el 80% a Estados Unidos, una gran parte son por empresas de Estados Unidos, esas mismas empresas van a estar empujando para que no pasen estas cosas” comentó Enrique Portillo, director ejecutivo en Cushman & Wakefield.
Si bien la imposición de aranceles del 25 por ciento parecería poner a las empresas instaladas en México en una situación poco favorable, la incertidumbre ha permitido explorar opciones que permiten un panorama más alentador, como la diversificación de mercados y reducir la importación de productos provenientes de China para comenzar a producirlos en el país, además de facilitar la formalidad para generar mayor confianza en los inversionistas.
Por otra parte, la imposición de aranceles tendría impactos negativos en el propio mercado estadounidense, elevando los precios al consumidor final y ocasionando un alza inflacionaria.
Los cambios en la política económica y el anuncio de los aranceles por parte del gobierno de Estados Unidos han provocado que se pause la llegada de inversiones chinas a México, además de la volatilidad en el precio del dólar, por lo que expertos recomiendan a las empresas, contar con un plan de cobertura, presupuestar los tipos de cambio y cubrir los gastos con algún derivado financiero.
“Los impactos clave vienen en el costo de los insumos, costos de materias primas, exportaciones, importaciones, costos operativos. Aquí yo creo que principalmente la depreciación del peso va a impactar a las empresas importadoras. Sin embargo, creo que cuando tú tienes un tipo de cambio presupuestado puedes mitigar todos esos riesgos” comentó Dante Fabián López Luna, especialista de derivados en Banco Base.
Finalmente, a pesar de los retos que se están presentando en el mundo de la industria, para los expertos, el desarrollo continuará, principalmente en las zonas donde ya existe una importante presencia de las empresas y clústeres de manufactura, como los estados fronterizos, la zona del bajío y el estado de Querétaro entre otros.
Si bien, el plan México, anunciado por el Gobierno Federal pretende el desarrollo de industrias en todo el país, se requiere de un plan transexenal y bien estructurado, aunque difícilmente el mismo tipo de procesos que se aplican en la zona norte pudieran replicarse en estados del sur, debido que la especialización del capital humano requirió de muchos años de experiencia y evolución, acompañados de una vinculación entre el sector educativo y el productivo.
“Los retos de infraestructura son muy importantes, la logística es algo complicado, se requiere tener una vinculación con el sector educativo, con las universidades, si existe la voluntad por parte del gobierno de tener un plan bien estructurado que le permita a los inversionistas aterrizar operaciones en algún momento allá, pero para que eso suceda primero hay que desarrollar infraestructura y preparar talentos” comentó Javier Ortiz, director nacional del Comité de Comercio Exterior y Aduanas de Index Nacional.
En conclusión, si bien existen factores que pudieran complicar el dinamismo en el desarrollo de industria, la fortaleza del sector en México, respaldada por instrumentos, estrategias y alianzas, además del basto y experimentado capital humano, permitirán a las empresas continuar impulsando la industria en las diferentes regiones del país, superando al final del día los retos de una nueva política arancelaria.
Revive los detalles del Webinar “Cambio de Gobierno en EE. UU.: Retos y Oportunidades para el Comercio Internacional en México” en https://mexicoindustry.com/webinars/cambio-de-gobierno-en-ee-uu-retos-y-oportunidades-para-el-comercio-internacional-en-mexico