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En la región Bajío, las empresas manufactureras tienen grandes oportunidades para incursionar y posicionarse en el sector automotriz, y así llevar a cabo negocios con empresas que pertenezcan a una cadena productiva nacional e internacional, debido a que es precisamente en esta región donde, en los últimos años, se ha incrementado la inversión extranjera directa, principalmente en este sector, lo cual ha sido un motor de crecimiento sostenido.
Dicho lo anterior, es de gran importancia que las empresas pertenecientes al sector o aquellas que desean incursionar en el mismo, consideren desde un punto de vista de negocios y de ambiente regulatorio, las principales áreas de oportunidad que deben identificar y los riesgos inherentes a su nicho de mercado.
En nuestra experiencia asesorando al sector, hemos identificado diversas áreas que, atendiéndose, pueden incrementar las probabilidades de éxito en su gestión de negocios. Una de estas áreas de oportunidad es la adopción de tecnologías de vanguardia y prácticas corporativas sanas que les ayuden a administrar oportuna y eficientemente la información que genera su operación, de tal forma que permita contribuir con la correcta toma de decisiones, así como con la identificación de las brechas que deben cerrar para la manufactura de productos rentables y de alta calidad de exportación.
Es fundamental señalar que la adopción de tecnologías, como la implementación de un sistema de cómputo para la planeación de recursos empresariales (“ERP”, por sus siglas en inglés), generalmente es el primer gran paso hacia un siguiente nivel en una empresa de manufactura de alto desempeño.
Este tipo de herramientas de gestión ayuda a minimizar costos, optimizar operaciones de logística, mejorar el control de inventarios, dar seguimiento oportuno de cobranza, cumplir los estándares de calidad, generar información contable confiable y mejorar la lectura de los estados financieros para determinar qué tan saludable es la posición financiera de la empresa, así como definir si se puede continuar operando con recursos propios o si es necesario recurrir a esquemas de financiamiento razonables de acuerdo con el volumen de operaciones de la empresa y sus indicadores financieros.
Otra área de oportunidad que hemos identificado es la inversión en recursos que permitan a las empresas obtener certificaciones, tanto operativas (ISO) como regulatorias y fiscales (certificaciones en materia de comercio exterior, Programas IMMEX, certificaciones en IVA, entre otras).
Este tema es relevante debido a que una empresa que cuenta con certificaciones probadas, demuestra un determinado nivel de confiabilidad. Eso le puede abrir puertas para ser contratada por las grandes empresas de capital extranjero.
De ser aceptada como proveedor de alguna de tales empresas, ese galardón curricular podría ayudar en generar las órdenes de compra de producción con otras empresas similares del sector, a la par que se incrementa su cartera de clientes correspondiente, situación que genera un circulo virtuoso para la generación de nuevos negocios.
MÁS INFORMACIÓN:
Enrique Cordero
Socio de Impuestos y Servicios Legales de Deloitte
www.deloitte.com/mx
Dicho lo anterior, es de gran importancia que las empresas pertenecientes al sector o aquellas que desean incursionar en el mismo, consideren desde un punto de vista de negocios y de ambiente regulatorio, las principales áreas de oportunidad que deben identificar y los riesgos inherentes a su nicho de mercado.
En nuestra experiencia asesorando al sector, hemos identificado diversas áreas que, atendiéndose, pueden incrementar las probabilidades de éxito en su gestión de negocios. Una de estas áreas de oportunidad es la adopción de tecnologías de vanguardia y prácticas corporativas sanas que les ayuden a administrar oportuna y eficientemente la información que genera su operación, de tal forma que permita contribuir con la correcta toma de decisiones, así como con la identificación de las brechas que deben cerrar para la manufactura de productos rentables y de alta calidad de exportación.
Es fundamental señalar que la adopción de tecnologías, como la implementación de un sistema de cómputo para la planeación de recursos empresariales (“ERP”, por sus siglas en inglés), generalmente es el primer gran paso hacia un siguiente nivel en una empresa de manufactura de alto desempeño.
Este tipo de herramientas de gestión ayuda a minimizar costos, optimizar operaciones de logística, mejorar el control de inventarios, dar seguimiento oportuno de cobranza, cumplir los estándares de calidad, generar información contable confiable y mejorar la lectura de los estados financieros para determinar qué tan saludable es la posición financiera de la empresa, así como definir si se puede continuar operando con recursos propios o si es necesario recurrir a esquemas de financiamiento razonables de acuerdo con el volumen de operaciones de la empresa y sus indicadores financieros.
Otra área de oportunidad que hemos identificado es la inversión en recursos que permitan a las empresas obtener certificaciones, tanto operativas (ISO) como regulatorias y fiscales (certificaciones en materia de comercio exterior, Programas IMMEX, certificaciones en IVA, entre otras).
Este tema es relevante debido a que una empresa que cuenta con certificaciones probadas, demuestra un determinado nivel de confiabilidad. Eso le puede abrir puertas para ser contratada por las grandes empresas de capital extranjero.
De ser aceptada como proveedor de alguna de tales empresas, ese galardón curricular podría ayudar en generar las órdenes de compra de producción con otras empresas similares del sector, a la par que se incrementa su cartera de clientes correspondiente, situación que genera un circulo virtuoso para la generación de nuevos negocios.
MÁS INFORMACIÓN:
Enrique Cordero
Socio de Impuestos y Servicios Legales de Deloitte
www.deloitte.com/mx
