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La industria automotriz se encuentra en la búsqueda del vehículo que permita una conducción autómata, segura y eficiente. En este 2020 se dio un gran paso para la masificación de estas tecnologías, siendo la primera vez que una empresa lanza al mercado un kit que habilita la conducción autónoma por menos de 1,000 dólares, poniendo esta tecnología de producción en masa al alcance de la industria automotriz, sin un alto impacto en el precio para el usuario final. Esto representa un hito sin precedentes, pues hasta ahora esta tecnología estaba disponible en vehículos de lujo cuyo segmento podía amortizar los altos costos de dichos implementos en producción masiva.
El pasado 6 de enero de 2020, en el CES de Las Vegas, ZF Friedrichshafen A.G. reveló el sistema co-ASSIST, que pondrá la conducción autónoma de nivel 2 al alcance de los grandes fabricantes de automóviles, permitiendo el acceso masivo mediante esta suite tecnológica. La plataforma presentada consiste en una unidad de control computarizada, con algoritmos de seguridad provista de inteligencia artificial, una cámara frontal que la hacen capaz de tomar el control del vehículo e incluso habilitan la lectura de señales de tráfico, tales como límites de velocidad o condiciones de emergencia. Permitirán incluso identificar trayectos recurrentes, el sistema además está dotado de un sensor de medio rango al frente que permite mantener distancias, identificar colisiones inminentes y realizar frenados de emergencia, así como radares en las cuatro esquinas del auto para identificar cualquier obstáculo físico que ponga en peligro al vehículo, sus ocupantes o terceros.
Una de las ventajas de la tecnología develada es que no está ligada a un rango de carreteras mapeado, sino que es capaz de ver (gracias a su cámara frontal) los carriles marcados en el piso habilitando al sistema para ser utilizado en cualquier camino en el que la visibilidad lo permita.
Los sistemas autónomos de nivel 2 se caracterizan por ser capaces de controlar aceleración, frenado y dirección del vehículo, permitiendo que se realicen maniobras automáticamente como mantenerse o salir de la autopista, cambiar de carril, rebasar e incluso hacer maniobras de emergencia, sin embargo, en este nivel de automatización se requiere que el conductor esté al tanto del control del vehículo para intervenir cuando la computadora no puede responder adecuadamente a las peculiaridades del camino.
Será una reconocida ensambladora asiática la primera en hacer uso de esta tecnología poniéndola al alcance de los mercados en segmentos masivos, el vehículo podrá adquirirse hacia el cierre del 2020 y por supuesto no pertenecerá al segmento de vehículos de lujo.
El pasado 6 de enero de 2020, en el CES de Las Vegas, ZF Friedrichshafen A.G. reveló el sistema co-ASSIST, que pondrá la conducción autónoma de nivel 2 al alcance de los grandes fabricantes de automóviles, permitiendo el acceso masivo mediante esta suite tecnológica. La plataforma presentada consiste en una unidad de control computarizada, con algoritmos de seguridad provista de inteligencia artificial, una cámara frontal que la hacen capaz de tomar el control del vehículo e incluso habilitan la lectura de señales de tráfico, tales como límites de velocidad o condiciones de emergencia. Permitirán incluso identificar trayectos recurrentes, el sistema además está dotado de un sensor de medio rango al frente que permite mantener distancias, identificar colisiones inminentes y realizar frenados de emergencia, así como radares en las cuatro esquinas del auto para identificar cualquier obstáculo físico que ponga en peligro al vehículo, sus ocupantes o terceros.
Una de las ventajas de la tecnología develada es que no está ligada a un rango de carreteras mapeado, sino que es capaz de ver (gracias a su cámara frontal) los carriles marcados en el piso habilitando al sistema para ser utilizado en cualquier camino en el que la visibilidad lo permita.
Los sistemas autónomos de nivel 2 se caracterizan por ser capaces de controlar aceleración, frenado y dirección del vehículo, permitiendo que se realicen maniobras automáticamente como mantenerse o salir de la autopista, cambiar de carril, rebasar e incluso hacer maniobras de emergencia, sin embargo, en este nivel de automatización se requiere que el conductor esté al tanto del control del vehículo para intervenir cuando la computadora no puede responder adecuadamente a las peculiaridades del camino.
Será una reconocida ensambladora asiática la primera en hacer uso de esta tecnología poniéndola al alcance de los mercados en segmentos masivos, el vehículo podrá adquirirse hacia el cierre del 2020 y por supuesto no pertenecerá al segmento de vehículos de lujo.