Cinco fases clave para diseñar Cadenas de Suministro Competitivas

Estado de México/Puebla
Camilo Orbegozo .
Septiembre 2020
Camilo Orbegozo, P. director, Customer Success Strategy en LLamasoft
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Al hablar de diseñar la Cadena de Suministro nos referimos a la capacidad recurrente para reinventar y redefinir de forma óptima el flujo de producto, dinero e información para satisfacer la demanda de la mejor forma posible. En este contexto, es importante diferenciar: 1. La administración de una cadena de suministro y sus restricciones actuales, 2. La generación de cambios constantes de esas restricciones, para responder a las necesidades cambiantes del mercado.

Las grandes corporaciones trabajan en el diseño continuo de sus cadenas de suministro, las cuales deben ser flexibles y adaptables a cualquier situación. Uno de los grandes retos que enfrentamos es desarrollar una disciplina recurrente para tomar decisiones optimizadas con un enfoque estratégico y táctico, que responda de forma equilibrada a factores de sostenibilidad y competitividad en la industria.

Si consideramos como principales variables la competitividad y la sostenibilidad, presentes en la cadena de suministro, se puede desarrollar un proceso de cinco fases clave:

1. La alineación entre las estrategias, corporativa y de la cadena de suministro debe tener su origen en el diseño. Al considerar como intereses corporativos ser competitivos y sostenibles al mismo tiempo, es recomendable generar un marco estratégico que contextualice los elementos influenciadores, y los habilitadores que faciliten alcanzarlo.

2. Identificar las necesidades, restricciones y requerimientos del negocio que permitan traducir la estrategia en diseño. Previamente se debe entender a profundidad qué hace a la cadena de suministro competitiva y qué factores son lo que concentrará la determinación de sostenibilidad.

3. Describir la condición actual y definir posibles futuros que balanceen la competitividad y sostenibilidad. Estos posibles futuros deben estar fundamentados en la probabilidad de modificar variables del sistema.
4. Análisis de las brechas con la mejor opción. Una vez que se ha identificado cuál es la solución óptima, lo ideal es generar un entendimiento profundo de los resultados, y las implicaciones en la cadena de suministro para que este rediseño responda a las necesidades de competitividad y sostenibilidad definidas en el primer paso.

5. Desarrollar plan de acción para cerrar brechas. Finalmente, el proceso termina definiendo cómo se debe afectar la cadena de suministro para que responda a los pilares estratégicos definidos.

En conclusión, aunque cada cadena es diferente, sin importar la industria, es posible seguir un proceso estándar que posibilite la habilidad corporativa de diseñar holísticamente, respondiendo a las estrategias de balancear la competitividad con modelos sostenibles, enfocados en el marco y contexto estratégico de cada organización.

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Adriana Guzmán
adriana@milenium.group