¿Cumples
realmente con los términos que establece la Ley?
Un tema que tanto para
las empresas, como para los contadores, resulta ocupante y preocupante a la
vez, tiene que ver en primera instancia con el ‘outsourcing’, o también
conocido como Servicios de Subcontratación.
El
tema de Outsorcing trae mucha injerencia o riesgos para las empresas que hacen
uso de los servicios de subcontratación o outsourcing, ya que por la mecánica
como se utiliza actualmente contratando a un proveedor de empleados las
empresas habían obtenido ciertas ventajas administrativas y algunas empresas
habían utilizado este sistema como un beneficio económico perjudicando a los
empleados porque se paga salarios más bajos, prestaciones menores (nunca
menores a las que proporciona la Ley), pero sí menores a las que tiene la empresa.
La
autoridad por su parte, se dio cuenta del abuso que se está haciendo de esta
figura y por este motivo ha realizado modificaciones en las leyes. La Ley
Federal de Trabajo, que tuvo modificaciones en noviembre del 2012 y que entró
en vigor en enero del 2013; modificó la definición de subcontratación y dentro
de los parámetros indica que <
Además,
no se pueden tener mezclados empleados de la compañía con empleados de
outsourcing. “En el momento en que se tengan empleados de la compañía y del
outsourcing desarrollando la misma actividad, en términos de la Ley Federal, ya
no es subcontratación; por lo que la empresa que estuviera haciendo uso de los
servicios es un patrón responsable 100%, de esta manera, todos los beneficios
con los que cuentan los empleados de la empresa los deberían tener también los
empelados de outsourcing”, mencionó el C.P.C. Luis Rodolfo Zendejas de la
Torre, socio de Impuestos Laborales de Baker Tilly Mexico.
Otro
aspecto importante es que se modificó el Art. 127 de la Ley Federal del
Trabajo, misma que indica que quien tiene derecho al PTU (Participación de los
Trabajadores sobre las Utilidades) son todos los empleados que laboran en el
establecimiento. Aquí ya no hace distinción mencionando a los empleados de la
empresa, sino a todo aquel ‘propio y ajeno’ que participen en el desarrollo de
lo que generó la riqueza.
La
única autoridad que puede definir o no si es subcontratación es la Secretaría
de Trabajo y es a través de la misma Ley Federal del Trabajo, pero lo que hace
la Secretaría de Hacienda, a través del
Sistema de Administración Tributario es poner reglas que limiten el accionar de
empresas de outsourcing, de manera que limita o complica que el pago de
servicios que se realicen a estas empresas sean deducibles para quien los
contrata.
Para
que sea deducible el gasto de subcontratación, es cuando la subcontratación -en
términos de la Ley Federal de Trabajo- cumpla con una serie de características;
pero en el momento en que refiere a la definición de subcontratación de la Ley
Federal de Trabajo es necesario ver si se cumple o no conforme a lo dispuesto
en la Ley Federal de Trabajo.
Esto
acarrea problemas de deducibilidad del gasto para términos de Impuesto sobre la
Renta, IVA acreditable y aún más en la Ley Federal para la Prevención e
Identificación de Operaciones con recursos de Procedencia Ilícita (o Ley
Antilavado), ya que se tipifica a este tipo de operaciones como operaciones de
riesgo.
“En
cuanto a la Ley Federal para la Prevención e Identificación de Operaciones con
recursos de Procedencia Ilícita, tienes un conflicto cuando haces operaciones
con empresas de outsourcing, y la intención de la autoridad es a que las
empresas de subcontratación que existen realmente se dediquen a la
subcontratación como lo establece la Ley Federal de Trabajo”, destacó el C.P.C.
Luis Rodolfo Zendejas de la Torre, socio de Impuestos Laborales de Baker Tilly
Mexico.
De
igual forma dentro de las obligaciones que se generan al hacer uso del servicio
de subcontratación, se deben reportar los contratos de este tipo al IMSS, y
para el dictámen electrónico del IMSS, el instituto solicita información de este
tipo de operaciones en el propio dictamen.