Hacer una carrera ejemplar implica varios sacrificios para llegar a ocupar un puesto importante dentro de las empresas, pero abrirse camino como foráneo para llegar a la industria es un mérito mayor, ya que se logra superar diversos obstáculos, tal es el caso de Citlali Esquivel Ibarra, originaria de Nueva Rosita, Coahuila, y quien funge actualmente como Coordinadora del Sistema de Calidad en Wolverine Estampados de Coahuila.
Citlali Esquivel decidió hacer su carrera profesional en la capital coahuilense, debido a la gran relevancia industrial que tomaba la región sureste del Estado en aquel entonces.
“Me mudé a Saltillo porque estaba creciendo todo lo que era la industria, previendo en un futuro, estudié en el Tec de Saltillo, soy ingeniero industrial, tengo una maestría en la UANE, de gestión de negocios de manufactura, por eso me enrolé y ya soy saltillense”, expresó.
Desde hace casi seis años, Esquivel Ibarra desempeña sus labores en Wolverine, en Ramos Arizpe, creciendo profesionalmente a la par de la empresa, la cual se ha expandido en más de un 100 por ciento.
“Yo trabajo desde los 18 años, soy TSU
en procesos de producción y mi primera experiencia fue en Cifunsa, donde
aprendí los procesos de calidad y de ahí me fui a trabajar a Monterrey en la
industria alimenticia, después continué en Saltillo y ahora estoy en Wolverine.
Cuando yo llegué era una empresa chica, con la mitad de las prensas que hoy en
día tenemos, fue un gran reto porque eres ‘todólogo’ y aprendes de casi todas
las áreas”, narró Citlali.
Relata que su especialidad es laborar en puestos de sistemas de calidad, “Toda mi vida me he enfocado a sistemas de calidad; implementación, IATF, ISO 14000, en sí soy quien implementa esos sistemas de calidad, aunque aquí el reto es que hay que cumplir con varios roles más dentro de la empresa. Lo que me gusta de Wolverine y la industria es que nunca es un día igual, siempre hay un reto nuevo que resolver, y tienes que estar preparado para eso”, añadió.
“A Wolverine no tengo más que darles las
gracias, porque aquí no soy un número más, aquí soy Citlali, viene el dueño y
nos conoce y saluda por nuestro nombre. Además hay mucha flexibilidad para
temas familiares y eso se agradece y uno trata de retribuirlo dando resultados”,
finalizó la originaria de Nueva Rosita.
