Caterpillar inició operaciones en Nuevo Laredo en 1988, producto de un proyecto que se hizo para explorar el concepto de maquiladora, esta empresa siempre ha sido conservadora y llegaron con el objetivo de ver el programa de incentivos de maquiladora y lo arrancaron precisamente hace 30 años.
En un inicio el proyecto fue pequeño, iniciaron operaciones con una planta de 20 mil pies cuadrados y no más de 30 empleados ocupando un edificio rentado en un área industria de la ciudad; para 1994, Caterpillar ya había transferido sus operaciones a un edificio de 70 mil pies cuadrados y habían crecido a 120 empleados. Diez años después del inicio de operaciones construyeron un edificio propiedad de Caterpillar que contaba con 105 mil pies cuadrados y 200 empleados en la ciudad. Actualmente, el campus ocupa 3 plantas de remanufactura, un centro logístico y un poco más de 2 mil personas (contando al personal que labora en el área de remanufactura y de logística trabajando para Caterpillar en la ciudad), y tienen cerca de 600 mil pies cuadrados de infraestructura.
Caterpillar
Reman se ubica en Parque FINSA y tiene 600 empleados que se enfocan en hacer
inyectores; es también en este parque que se ubica otra de sus plantas donde
hacen turbocargadores, así como partes nuevas que van dentro de los inyectores;
una última planta se encuentra en Parque Oradel en donde remanufacturan
marchas, alternadores, filtros de partículas, tabletas electrónicas y partes
hidráulicas del motor; en Nuevo Laredo son mil 800 empleados
Caterpillar Reman
La
división a la que pertenece Caterpillar en Nuevo Laredo es de remanufactura, lo
cual implica -además de los procesos tradicionales de manufactura-, uno que se
conoce como ‘logística inversa’ donde aquel componente o ensamble que ya ha
perdido su vida útil en el campo se regresa (por medio de este proceso de
logística inversa) a la planta en donde se hará la remanufactura.
Todo el
proceso inicia cuando llegan las piezas para ser desensambladas completamente,
después pasan a un proceso de lavado y reparación de aquellas partes que
necesiten ser reparadas; después de este paso se ensambla el producto como si
fuera nuevo.
Caterpillar
en Nuevo Laredo hace inyectores y todo el proceso se debe llevar a cabo en un
cuarto limpio debido a las especificaciones -que en este caso son de micrones-
para tener una idea un micrón equivale a 1/17 del grosor de un cabello, por lo
que las especificaciones en este proceso deben ser lo más limpias posible.
RETOS
Sin
duda ha sido apoyar el crecimiento que se ha tenido de forma significativa,
pues creció de una planta pequeña de 20 mil pies cuadrados y 30 personas, a una
de más de 2 mil personas en 30 años.
Comentó
además que poder atraer, retener y desarrollar el talento en la ciudad ha sido
uno de los principales retos para los cuales han trabajado fuerte en
vinculación con las diversas instituciones académicas de la ciudad, así como
con los diferentes organismos que les ayudan con la captación de la fuerza de
trabajo para su oferta de empleo.
Luis
Hernández García, gerente general de operaciones de Caterpillar en Nuevo
Laredo, agregó que otros retos tienen que ver con la tecnología, con los
avances tecnológicos que se han presentado; en sí para poder captar esa
tecnología e implementarla en sus procesos, hacerlos eficientes y atractivos.
Evolución de la Manufactura en México
Luis
Hernández comentó acerca de este tema y en particular en Caterpillar, pues una
vez que arrancó el tema de las maquiladoras -y del cual Caterpillar no fue
ajeno- se instalaron en México y la primera generación se enfocaba en minimizar
el costo del valor agregado y maximizar la efectividad y la eficiencia.
El
talento mexicano se limitaba a correr las líneas de producción y tal vez alguna
parte de los supervisores de producción que se integraba eran mexicanos. Sin
embargo, la parte de liderazgo e ingeniería correspondía al talento que venía
del extranjero, en este caso de Estados Unidos, y conforme fue evolucionando la
maquiladora se generaban liderazgos locales que sustituían aquellos que
llegaron temporalmente de Estados Unidos.
“El
desarrollo de liderazgo es una parte importante y también ha sido un reto para
nosotros, de tal manera que se sustituyeron los liderazgos tradicionales
extranjeros que había en la maquiladora; y en el caso de Caterpillar así
sucedió”, dijo Luis Hernández.
Ahora
al ingeniero mexicano se le está dando la responsabilidad y asignación de
generar diseño de producto y procesos; ya no viene el ingeniero estadounidense
a instalar procesos, sino que el propio ingeniero mexicano con su talento y
esfuerzo desarrolla los procesos y productos que se requieren para seguir
siendo competitivos.
“Estamos
ante una coyuntura importante en la industria de la manufactura en México
porque nuestro talento local tiene ahora la responsabilidad de llevar la
bandera hacia delante y ya no es suficiente con ser un productor de bajo costo
-ya que para esto existe competencia a nivel global- ahora lo que marca la
diferencia es el nivel de competencia, capacidades y el desarrollo del talento,
sobre todo en el área de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas”,
explicó Hernández.
Industria 4.0
En
Caterpillar han empezado a incursionar en Industria 4.0, -claro que existen
esfuerzos que se han desarrollado de manera orgánica- actualmente están
trabajando con las técnicas y todo lo relacionado con i4.0.
“Estamos
trabajando fuerte en lo que son análisis de datos (data analytics) esta es una
parte importante de la i4.0 que nos lleve a tener la información necesaria, no
solo para tomar decisiones, sino también para que nos haga predicciones en base
a una serie de alternativas que podemos tener en nuestra toma de decisiones”,
aseguró Hernández.
En
automatización, Caterpillar trabaja en una conceptualización que es parte
también de esta transformación de la industria de manufactura que son los
robots colaborativos, es decir aquellos que pueden trabajar enseguida de los
operadores.
“Aquí
somos remanufactura, y algo que la distingue es que nunca se va a encontrar una
pieza igual a otra y esto es contrario a la manufactura tradicional. Siempre es
difícil automatizar con robots industriales que uno ve en la manufactura
tradicional, ya que se requiere una serie de toma de decisiones en el momento
en que estás viendo la pieza. Sin embargo, hemos visto que los robots colaborativos
nos pueden ayudar para cuestiones de movimientos repetitivos que ya el operador
no tenga que hacer, así como también para cuestiones de precisión, pues el
robot lo puede realizar con mayor repetitividad que un operador”, puntualizó
Hernández.
30 años de trayectoria en NLD
“Nos
hemos beneficiado de manera mutua la comunidad de Nuevo Laredo y Caterpillar,
esta planta es una de las más exitosas en la corporación que genera excelentes
resultados tanto financieros como operacionales; desde el punto de vista de la
seguridad es una de las plantas más seguras,
de hecho ha recibido en cinco años consecutivos un premio que otorga el
presidente del corporativo por seguridad: “Por ser la planta más segura a nivel
mundial”, tomando en cuenta que cuenta con más de 500 ubicaciones alrededor del
mundo. Además, la planta en Nuevo Laredo ha adquirido en dos ocasiones el
Premio de Calidad por parte del corporativo.
Caterpillar
en Nuevo Laredo ha dado buenos resultados en calidad de sus productos;
productos relacionados con los motores diésel Caterpillar como inyectores para el
sistema de combustión, turbocargadores, marcha y alternadores, y módulos
electrónicos de control.
Estos
productos terminan su vida útil y regresan a la empresa para ser remanufacturados,
después son enviados para venta en el mercado de refacciones -este es el modelo
de negocio- y los productos son marca Caterpillar, misma que tiene un prestigio
y durabilidad; por lo que es importante lograr que el producto remanufacturado
sea tan bueno como si fuera nuevo y tan fuerte como siempre.
“Nuevo
Laredo nos ha dado talento que se ha desarrollado en la ciudad; nos hemos beneficiado
de Nuevo Laredo; pero también Nuevo Laredo se ha beneficiado de Caterpillar
porque al ser una empresa de prestigio siempre reviste a la ciudad, genera
empleos, genera una industria de servicios alrededor.”, dijo Luis Hernández.
Además,
Caterpillar cuenta con un programa amplio de responsabilidad social, queremos
ser un ciudadano corporativo, responsable en nuestra comunidad y estamos
enfocados en el área de educación principalmente, pero también asistencial, de
esta manera generamos una sinergia positiva en la comunidad.
La Mejor Marca de Empleo
Claudia
Contreras Faz, gerente de recursos humanos para las plantas de Caterpillar en
Nuevo Laredo, comentó que para las operaciones de Caterpillar en Nuevo Laredo
el llegar a 30 años representa la consolidación de la empresa en la comunidad,
y no solamente desde la perspectiva de negocio, pues ha sido un modelo de
negocio exitoso a lo largo de su trayectoria.
Desde
la perspectiva de los derechos y condiciones de trabajo Caterpillar Nuevo
Laredo ha logrado colocarse en los últimos años como la ‘Mejor Marca de Empleo’
en la región y es algo que a todos los empleados enorgullece, pues se ha
trabajado en conjunto para construir el mejor lugar para trabajar.
“Nuestras
condiciones de trabajo están por encima de muchas otras industrias colocadas no
solamente en Nuevo Laredo, sino en la región. Somos punto de referencia para
nuestras plantas hermanas en México y esto se debe en gran parte a las
prácticas que Caterpillar tiene en el tema de respeto a los derechos de los
empleados y sus condiciones de trabajo”, así lo explicó Claudia Contreras,
agregando que los esfuerzos en el tema de mujeres, jóvenes, de personas con discapacidad
y personas con diferentes trasfondos, hacen que Caterpillar Nuevo Laredo se
distinga como una fuerza de trabajo innovadora, flexible y feliz.
“No
existe mayor objetivo que persiga la organización que fomentar una cultura
inclusiva, estén sanos y felices”, expresó Claudia.